Sexo con Amor
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Sexo con Amor. Desde el título queda claro cual es el tema, que nunca se intenta disimular y cuya explícita exposición debe todo a la fuente de la que viene su inspiración creativa: la televisión. Una antigua norma crítica induce a ver con desconfianza a cualquier película demasiado exitosa. Esta ha sido un caso histórico: la mayor taquilla en la historia del cine chileno. Planteada como comedia popular de fácil consumo hay que reconocerle que cumple a cabalidad con ello. Repleta de escenas chistosas, con algunas más melancólicas y otras grotescamente aceleradas, la película no permite aflojar el interés del espectador, lo que no está mal como logro local. Después de todo viene a confirmar que el cine de género y especialmente la comedia, puede ser una rica veta a la que el cine chileno podría recurrir con mayor frecuencia para obtener aun mayores logros.
Sinopsis
Un grupo de padres y apoderados de un cuarto básico discuten el modo en que desean que el colegio enfrente la educación sexual de sus hijos. Aunque para muchos de ellos, el sexo no es un tema resuelto. Sexo con Amor es la historia de tres de estas parejas y de cómo el instinto erótico y sus emociones pueden más que sus razones.
Mientras la pareja de Boris Quercia y María Izquierdo funciona realmente bien, la de la profesora Sigrid Alegría resulta dispareja porque nunca entendemos que ella se enrede con un intelectual tan aburrido como Patricio Contreras, mientras es la pareja de un enamorado pintor más joven y simpático. La última historia incluye a un incontinente sexual de nivel acomodado, cuya esposa embarazada parece ignorar que el marido la engaña con cualquier falda que se mueva. En parte por pertenecer a un mundo social no bien explorado y en parte por la intrínseca antipatía del personaje, interpretado por Álvaro Rudolphy
Críticas
Como comedia cumple la expectativa del espectador, la película pierde oportunidades sabrosas de jugar sobre sus propios presupuestos, ya que pierde oportunidad de aprovechar el gran sentido de la historia en un grupo de escenas. Y es que el humor se reserva más a la contundencia obvia del chiste vulgar que a la más sutil alusión erótica, de la que no hay trazas por parte alguna. Queda el reconocimiento de su efectividad como relato de género, sus apuntes realistas, y algunas buenas actuaciones, especialmente las femeninas.
Ficha Técnica
- Guión: Boris Quercia
- Dirección: Boris Quercia
- Dirección de Fotografía: Antonio Quercia
- Música Original: Álvaro Henríquez
Premios
Ganadora de cinco premios en el Festival de Huelva