Toxocariosis
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Toxocariosis. Es una afección cutánea frecuente, zoonótica, que en ocasiones se puede manifestar en órganos internos (sistémica). La enfermedad se presenta de forma aguda, con lesiones cutáneas serpiginosas y pruriginosas. Se localiza habitualmente en los suelos arenosos y la tierra.
Casi siempre las lesiones se presentan en los pies, aunque también se pueden observar en los glúteos, el tórax y las extremidades superiores. Su evolución es crónica y afecta principalmente a los niños; provoca los síndromes conocidos como larva migrans visceral y larva migrans ocular.
Distribución
Es de alcance mundial, debido a la migración y el contacto directo, al penetrar la larva por la piel sana o a través de una excoriación o herida en la piel.
Vías de transmisión
En los niños la transmisión es directa, por ingerir tierra contaminada y por el contacto directo con el pelo del animal, o indirecta, al consumir verduras crudas no lavadas. En los adultos, algunas infecciones surgen, a veces, por ingerir larvas en hígado crudo de res, ovejas o pollos contaminados. Los huevos llegan a la tierra por las heces de los gatos y perros.
Diagnóstico
Se debe hacer a partir de la historia epidemiológica (convivencia con perros y gatos, y hábitos de geofagia) y las manifestaciones clínicas. El diagnóstico de certeza se hace a través del hallazgo de larvas en los órganos afectados (hígado), mediante exámenes histológicos.