Lumbago crónico

Lumbago crónico
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Concepto:Se caracteriza por dolor en la región lumbar, que puede o no irradiarse al dorso y a los glúteos. Es de comienzo insidioso, muchas veces sin causa conocida.

Lumbago crónico. Es el dolor lumbar que se prolonga más allá de seis semanas. A veces es la continuación de un lumbago agudo que no ha curado del todo. Se asocia a vicios posturales, exceso de peso, alteraciones de la columna, alteraciones psíquicas, laborales, familiares, patologías asociadas, infecciosas, del mesénquima, metabólicas, tumorales, etc.

Etiología y Anatomía Patológica

El dolor de espalda en esta categoría es resultado de una sobrecarga relativa, sobre una estructura vulnerable de la región lumbosacra. Las grandes malformaciones, como por ejemplo el meningocele, tienen más importancia en sus aspectos neurológicos que por causar dolor lumbar. Entre las anomalías ocultas capaces de producir dolor, figuran la espondilolisis, espondilolistesis, sacralización de una o ambas apófisis transversas de la última vértebra lumbar y las articulaciones apofisarias asimétricas. Una columna vertebral con dichas anomalías es más vulnerable al stress y tiende a descompensarse ocasionando dolor. Una inadecuación relativa de los ligamentos que sostienen la columna vertebral puede crear de modo semejante una espalda débil; como también ocurre en caso en caso de debilidad de la musculatura que soporta el tronco, principalmente del grupo paraespinal y de los abdominales. La debilidad puede también ser consecuencia de una enfermedad nerviosa; pero con mayor frecuencia es resultado de una vida sedentaria, o del adelgazamiento de las paredes abdominales por embarazos repetidos. El concepto de carga que soporta la región lumbar es amplio e incluye no solo el peso corporal y el tipo de actividad, sino la eficacia con que la persona haga uso de la espalda. Por ejemplo, el dolor puede desarrollarse poco después de un parto en una mujer con gran sobrecarga de trabajo casero, incluso sin grandes anomalías de columna vertebral. Un individuo que se mantiene en buen estado físico, que observa un equilibrio entre actividad - reposo y utiliza el tronco correctamente, es probable que nunca presente dolor aunque tenga una anomalía ósea evidente.

Sintomatología

La historia típica del enfermo con dolor lumbar por estructura inadecuada consiste en dolor en el área lumbosacra, con carácter persistente o recurrente, de intensidad variable, que se alivia por el reposo y se agrava por la actividad. El dolor generalmente no es de suficiente intensidad como para impedir las actividades ordinarias, pero es posible que sobre el fondo del dolor crónico aparezcan brotes de dolor agudo. El dolor puede extenderse hacia los lados, pero sin irradiación ciática verdadera.

Diagnóstico

La exploración en la fase crónica generalmente es poco reveladora, aunque puede poner de manifiesto cierta disminución o exageración de la lordosis lumbar, sin espasmo muscular marcado, ni inclinación lateral. El margen del movimiento puede estar solo ligeramente disminuido, con cierto dolor en los límites. Habitualmente se descubre hipersensibilidad en los espacios intervertebrales últimos o penúltimos, o bien en zona adyacente a ellos. La exploración neurológica es normal. La fuerza de los músculos del tronco habitualmente es normal, pero al practicar pruebas a veces se ve que dichos músculos funcionan de modo inadecuado.

Tratamiento

El objetivo consiste en disminuir la sobrecarga, conseguir la analgesia y cuando es posible corregir la debilidad estructural. Es imperativo el reposo adecuado en casa. Debe corregir la obesidad. Casi todos los enfermos se sienten mejor cuando duermen en una cama con un colchón muy duro o con tabla debajo del mismo. Se debe insistir en que el paciente mantenga una postura erecta, aunque no con rigidez militar. Se debe aconsejar al paciente que cuando levante pesos lo haga con el tronco derecho; debe evitar el trabajo en posición agachada. El calor local, incluso la relajación en baño caliente alivia el dolor. Pueden emplearse los salicilatos (ácido acetilsalicílico o salicilato sódico, 0,6 gm. Por vía oral 3 ó 4 veces al día); pero deben evitarse los narcóticos. Si estos remedios son insuficientes, se puede prescribir fisioterapia, en la que se incluirá alguna forma de calor, ejercicio de condicionamiento general para hacer funcionar los músculos débiles y masaje. En muchos casos es aconsejable un corsé ortopédico, sobre todo con musculatura abdominal fláccida. En los enfermos emocionalmente estables, con lumbago que no responda al tratamiento conservador y que sea lo bastante intenso para dificultar las actividades ordinarias, el tratamiento operatorio puede ser útil. Consiste en la función raquídea (cuarta o quinta vértebras lumbares con el sacro), que corrige la debilidad estructural, ya que crea un puente óseo sólido sobre el área afecta.

Fuentes

  • Dr. Charles E. Light, El MANUAL MERCK., Whitehouse Station, NT., 1961, 1337 pag.
  • Imagen