Técnicas de diagnóstico por imagen

Revisión del 19:18 5 jun 2012 de Joao ssp.jc (discusión | contribuciones) (Tomografía por emisión de positrones)
(dif) ← Revisión anterior | Revisión actual (dif) | Revisión siguiente → (dif)
Técnicas de diagnóstico por imagen
Información sobre la plantilla
Bone-xray-hands.jpg
Concepto:Técnicas para el diagnóstico de diferentes metodos de Imagenología moderna.

Técnicas de diagnóstico por imagen. Además de los rayos X, usados desde hace más de cien años, existen nuevas técnicas de diagnóstico por imagen que incluyen la tomografía axial computarizada, la tomografía por emisión de positrones, la resonancia magnética y la ecografía o ultrasonido.

Radiografía

¿Cómo funciona?

Los rayos X tienen una longitud de ondas más corta que la luz visible y pueden penetrar en los tejidos corporales. Cuando su somete una parte del cuerpo a los rayos X, los tejidos densos como el óseo absorben los rayos y aparecen como zona brillantes en la película fotográfica revelada, que recibe el nombre de radiografía o placa. Los tejidos blandos aparecen como sombras grises. Esta técnica suele emplearse para diagnosticar trastornos o enfermedades que afectan a dientes, huesos, mamas y tórax. Para distinguir entre tejidos blandos adyacentes de la misma densidad, el médico a veces inyecta en el torrente sanguíneo del paciente un agente de contraste opaco a la radiación. Hoy día es frecuente que las radiografías se digitalicen para verlas en pantalla de computadoras.

Riesgos

Existe un ligero riesgo de dañar células y tejidos, pero suele ser mínimo en comparación con los beneficios. Si una mujer cree que está embarazada, debería informárselo a su médico antes de hacerse una radiografía. Los agentes de contraste, como el yodo, a veces causan reacciones alérgicas. Por ello, debe informarse al médico o radiólogo si se padece alguna alergia al yodo o a los mariscos, que contienen dicho elemento.

Beneficios

Se trata de una técnica rápida, por lo general indolora, relativamente barata y fácil de realizar. Por lo tanto, resulta particularmente útil para efectuar mamografías y diagnóstico de emergencia. Tras someterse a una radiografía, no quedan restos radiactivos en el cuerpo y no suelen presentarse efectos secundarios.

Tomografía Computarizada

¿Cómo funciona?

La tomografía axial computarizada (TAC) requiere un uso más complejo e intenso de los rayos X y emplea además sensores especiales. El paciente se acuesta en una camilla que se desliza por un túnel que hay en la máquina. Las imágenes son producidas por numerosos y finos haces de radiación y sensores que rotan 360µ alrededor del paciente. Se ha comparado el proceso a examinar con un pan cortándolo en rebanadas muy finas que luego se fotografían. Una computadora vuelve a juntar las rebanadas y suministra así una detallada vista de corte transversal del interior del cuerpo. Las máquinas más modernas efectúan un escáner helicoidal, o espiral, del cuerpo, con lo que aceleran el proceso. Como las tomografías suministran imágenes muy detalladas, a menudo se usan para examinar el tórax, el abdomen y el esqueleto, así como para diagnosticar diversos cánceres y otros trastornos.

Riesgos

Las tomografía suelen emplear dosis de radiación superiores a las radiografías. La exposición adicional conlleva un pequeño aumento del riesgo del cáncer, que debe tenerse muy en cuenta y contrastarse con los beneficios. Algunos pacientes experimentan reacciones alérgicas a los agentes de contraste, que normalmente contiene yodo, y en ciertos casos también puede haber riesgos para los riñones. Si se utiliza el un fluido de contraste, las pacientes con bebés deberán esperar veinticuatro horas o más tras la prueba antes de amamantarlos.

Beneficios

Esta técnica no es dolorosa ni agresiva, y proporciona datos muy detallados que una computadora puede convertir en imágenes tridimensionales. El proceso es relativamente rápido y sencillo y permite descubrir daños internos, con lo que salva vidas. Además los escáneres no tienen efectos adversos sobre dispositivos médicos implantados.

Tomografía por emisión de positrones

¿Cómo funciona?

Para realizar una tomografía por emisión de positrones (conocida como PET, por sus siglas en inglés), se agrega una sustancia radiactiva a un compuesto natural, casi siempre glucosa, y se inyecta al cuerpo. La imagen resultante se debe a los positrones, partícula con carga positiva que emiten los tejidos.
Los escáneres PET funcionan según el principio de que las células cancerosas, utilizan más glucosa que las células normales, y por ello, atraen una mayor cantidad de la sustancia radiactiva. Como resultado, los tejidos enfermos emiten mayor número de positrones, lo que provoca variaciones de color o de brillo en la imagen final.
Las tomografías computarizadas y los escáneres de resonancia magnética revelan la forma y la estructura de órganos y tejidos, mientras que los escáneres PET muestran su funcionamiento, lo que permite descubrir cambios en una etapa más temprana. Se puede efectuar un escáner PET en combinación con una tomografía y la imagen obtenida será más detallada. Sin embargo, un PET puede dar resultados erróneos si el paciente ha comido en cierto período de tiempo antes de la prueba o si es diabético a su nivel de azúcar no se halla dentro de los valores aceptables. Además como la radioactividad de las sustancias empleadas es de muy corta duración, es necesario hacer la prueba dentro de un límite de tiempo específico.

Riesgos

La cantidad de sustancia radiactiva utilizada es mínima y su radiactividad es de corta duración. La exposición a la radiación es baja. Aun así, puede suponer un riesgo para un feto en desarrollo. Por lo tanto si una mujer cree que esta embarazada, debería informarlo a su médico y a los técnicos encargados de hacer las prueba. Es probable que a las mujeres en edad fértil se les realice un análisis de sangre o de orina para determinar si están embarazadas. Si además de un aprueba PET se va a realizar una TAC, deberían tener en cuenta también los riesgos que conlleva esta última prueba.

Beneficios

Como los escáneres PET muestran no solo qué forma tienen los órganos y tejidos sino también si funcionan adecuadamente, pueden revelar problemas antes de que los cambios en la estructura de los tejidos se observen mediante una TAC o una resonancia magnética.

Resonancia magnética

¿Cómo funciona?

La resonancia magnética emplea un poderoso campo magnético, ondas de radio (no rayos X) y una computadora para producir imágenes muy detalladas de casi todas las estructuras internas del cuerpo. Los resultados permiten a los médicos examinarlas minuciosamente y hacer diagnósticos imposibles de realizar con otras técnicas.
Por ejemplo, la resonancia magnética es una de las pocas técnicas que permiten ver a través del hueso, lo que la convierte en una herramienta excelente para examinar el cerebro y otros tejidos blandos.
El paciente no debe moverse mientras se obtienen las imágenes, y como el escáner actúa mientras uno se desliza por un estrecho túnel en la máquina, hay quien experimenta claustrofobia.

No obstante, en los últimos años se han creado escáneres para pacientes obesos o que sufren de ansiedad. Como es natural, en la sala de exploración no se permiten objetos de metal como bolígrafos, relojes, joyas, horquillas para el pelo y cremalleras, ni tampoco tarjetas de crédito u otros artículos que podrían interferir en el campo magnético.

Riesgos

Si se utiliza algún fluido de contraste, hay un ligero riesgo de reacción alérgica, pero es inferior al que conlleva las sustancias a base de yodo utilizadas normalmente en las radiografías y tomografías. Por lo demás, la resonancia magnética no supone riesgo para el paciente. Sin embargo, debido al efecto del poderoso campo magnético, los pacientes con ciertos implantes quirúrgico o fragmentos de metal dentro del cuerpo (como balas por ejemplo) quizás no puedan someterse a este tipo de prueba.

Beneficios

La resonancia magnética no emplea radiación peligrosa y resulta particularmente útil para detectar anormalidades en los tejidos sobre en el interior o debajo del hueso.

Ecografía

¿Cómo funciona?

El escáner por ultrasonido, o ecografía, es básicamente un tipo de sonar que utiliza ondas sonoras imposibles de percibir para el oído humano. Cuando las ondas alcanzan un lugar en el que se produce un cambio de densidad en los tejidos, por ejemplo la superficie de un órgano, generan un eco. Una computadora analiza dicho eco y revela en dos o tres dimensiones las características del órgano, como su profundidad, tamaño, forma y consistencia. Las ondas de baja frecuencia permiten obtener imágenes de las zonas más profundas del cuerpo, mientras que la frecuencias ultra elevadas (UHF) facilitan el estudio de órganos superficiales como los ojos y las capas de la piel, y pudieran contribuir al diagnóstico del cáncer de piel.

En la mayoría de los casos, el examinador emplea un instrumento de mano llamado transductor. Tras aplicar un gel transparente a la piel, desliza el transductor sobre la zona de interés, y la imagen resultante aparece de inmediato en una pantalla de computadora. Cuando es necesario, se puede añadir un pequeño transductor a una sonda e insertar esta en alguna abertura natural del cuerpo para posibilitar ciertos exámenes internos.

El ultrasonido Doppler es una técnica sensible al movimiento y se utiliza para observar el flujo sanguíneo, lo cual es muy útil al examinar órganos y también tumores, que suelen una cantidad excesiva de vasos sanguíneos.
Las imágenes ecografías pueden ayudar a los médicos a diagnosticar diversas enfermedades y discernir las causas subyacentes de los síntomas, desde problemas de la válvula cardíacas hasta quistes en las mamas, así como a determinar la salud de un feto. Por otra parte, como las ondas ultrasónicas no atraviesan los gases, dicha técnica tiene limitaciones cuando se aplica a cierta zonas del abdomen. Además, es posible que las imágenes no tengan tan buena resolución como las obtenidas con otras técnicas, como la radiografía.

Riesgos

Aunque el ultrasonido normalmente es seguro si se emplea de la manera adecuada, es un tipo de energía y puede tener efectos físicos en los tejidos, incluso en los del feto. Por lo tanto las ecografías prenatales no deben considerase exentas de riesgos.

Beneficio

Es una técnica disponible en muchos lugares, no es agresiva y resulta relativamente barata. Además, proporciona imágenes en tiempo real.

Fuentes