Echeveria

Echeveria
Información sobre la plantilla
Echeveria.jpg
Nombre Científico:'
Reino:Plantae
División:Magnoliophyta
Clase:Magnoliopsida
Orden:Saxifragales
Familia:Crassulaceae
Género:Echeveria

Echeveria. Género de plantas suculentas, pertenecientes a la familia de las Crassulaceae.

Características

Planta con hojas carnosas, de forma más bien aovada y dispuestas en roseta (tipo alcachofa), muy compactas. El color es variado del verde intenso, al azul pálido, al gris-azulado, al verde rosado.

Las flores se desarrollan sobre un largo tallo que crece del centro de la roseta. Generalmente son muy llamativas, con forma de farolillos, de color rojo o rosado y con los márgenes amarillos. Florece a partir de la primavera y durante todo el verano.

Distribución y hábitat

Plantas suculentas originarias de América central (sobre todo de México) y de América Noroccidental, de zonas caracterizada por fuertes oscilaciones climatológicas entre el día y la noche.

Riego y cuidados

Estas plantas pueden ser regadas aproximadamente una vez cada cuatro semanas, con el equivalente a dos vasos de agua, tratando de dejar bien mojadas todas las hojas. Antes de aplicar una nueva cuota de agua, es mejor dejar el terreno seco por un par de días, y durante los meses de invierno se puede evitar el riego, sobre todo en aquellas zonas con clima frío.

Cuando el cultivo se hace en maceta, es aconsejable dejar el contenedor en inmersión por unos minutos, haciendo que la tierra absorba la humedad que necesita.

Reproducción

La reproducción es muy fácíl (excepto híbridos) por esquejes de hojas , tallos florales y rosetas, también se reproducen por semillas con facilidad, aunque hay que tener en cuenta que no son autofértiles.

Plagas y enfermedades

Como todas las suculentas, estas plantas están sometidas a fisiopatías, es decir, enfermedades debidas no a agentes patógenos sino a causa de técnicas de cultivo no adecuadas.

El tallo de la planta se pudre

Este síntoma indica demasiados riegos. Remedio: si algunos tallos no están atacados todavía, podes intentar salvar la planta, sacala con todo el pan de tierra de la maceta y dejala al aire así el terreno se seca. Controla las raíces y elimina las muertas cortándolas al menos 1 cm sobre la zona dañada con una tijera afilada y desinfectada, igual que los tallos ya muertos. Si la planta tiene solo un tallo y fue atacado, corta toda la parte podrida y un centímetro del tallo no podrido. Rocia la superficie de corte con un polvo fungicida de amplio espectro y trasplántala. Espera como mínimo dos semanas antes de regar de nuevo.

La planta se marchita y pierde las hojas

Este síntoma suele deberse a temperaturas demasiado bajas o a corrientes de aire frío. Remedio: coloca la planta en una posición más idónea.

Las partes verdes de la planta se decoloran y aparecen como vaciadas

Este síntoma generalmente es debido a riegos demasiado escasos. Si pasa mucho tiempo sin que la planta reciba riegos, especialmente en verano, la planta agota toda el agua contenida en los tejidos y aparece como vaciada y achucharrada. Remedio: no siempre si se llega a este estado es posible recuperar la planta, vale la pena intentar salvarla regándola.

Manchas pardas sobre el envés de las hojas

Las manchas sobre el envés de las hojas en general significan una infestación de cochinillas, unos insectos muy dañinos que pueden ser de dos tipos: cochinilla parda y cochinilla algodonosa. Para estar seguro, mirala con una lupa. Se caracterizan por tener, en el primer caso, una especie de escudo protector, de color oscuro y en el segundo caso un escudo de color blanco algodonoso.

Remedio: sacalas con un copo de algodón mojado en alcohol o si la planta es grande y en maceta, lavala con agua y jabón neutro frotando muy delicadamente con una esponja para retirar los parásitos. Luego, rocia con agua para eliminar todo el jabón.

Para las plantas más grandes y plantadas a cielo abierto, puede usar productos químicos específicos. Los tratamientos con insecticidas anticochinillas, para que sean más eficaces, deben ir dirigidos contra las [[larvas], que son más sensibles que la cochinilla adulta.

Usos

Además de sus uso ornamental también se usan como bioindicadores para la determinación de la presencia de mutágenos en el medio ambiente.

Fuentes