Enrique Hauser
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Enrique Hauser y Neuburger. Fue un médico judío de origen austro-húngaro, Ingeniero electrotécnico e inventor. Se le considera el introductor de los estudios socio–sanitarios (o médico sociales) en España y uno de los inventores eléctricos más prolifico de este país.
Síntesis biográfica
Nació en Gibraltar el 5 de octubre de 1866. Realizó estudios en Viena, Berna, París y Londres. En París se casó con su correligionaria Paulina, con la que pasó a Tetuán y luego el matrimonio se trasladó a Gibraltar, donde nacerían sus tres hijos.
Por problemas demográficos abandonaron el Perión pasando a Cádiz, hacia 1874. Posteriormente se trasladaron a Sevilla y luego a la capital de España, adquiriendo la nacionalidad española.
Fue alumno de la LXV promoción de la Escuela de Ingenieros de Minas de Madrid (Acta de 29 de septiembre de 1888). En 1889 marchó a Londres:
Labor profesional
A finales de 1889 regresó a España, trabajando como ingeniero electricista en la instalación del primer tranvía electrico que la casa Brush construyó entre Bilbao y Santurce.
El 28 de junio de 1895 ingresó en el Cuerpo de Ingenieros de Minas. A instancias del Director de la Escuela de Minas Luis de la Escosura, fue nombrado Profesor Agregado del Laboratorio, lo que le llevó a publicar numerosos trabajos en el campo de la Química. En 1908 se instaló el Laboratorio de Química Industrial en el nuevo edificio de la Escuela, del cual Hauser fue su director.
Hauser solicitó en la Oficina Espariola de Patentes, en el siglo XIX, al menos 4 patentes eléctricas[1].
El 29 de julio de 1905 se promulgó el Real Decreto creando una Comisión para el estudio del grisú y de los accidentes mineros. Antes de crear la Comisión del Grisú, Hauser había sido remitido a Europa para observar las mejoras o adelantos que puedieran introducir en la enseñanza y el estudio y análisis de las explosiones de grisú. Antes de partir hacia el extranjero acudió a Bilbao, para mejorar sus conocimientos, invitado por la Unión Española de Explosivos. Visitó, durante el primer semestre de 1905, Francia, Alemania, Inglaterra y Bélgica, recorriendo un centenar de minas grisutosas, laboratorios, fábricas, almacenes y Escuelas, poniendose al día en el tema que tanto le preocupaba, por afectar a la vida delos mineros. Durante su estancia en Lieja asistió al Congreso de Minas, Metalurgia, Mecánica y Geología.
En 1910, a propuesta del ingeniero de minas Jose María de Madariaga fue nombrado académico en la Real Academia de Ciencias Exactas, Físicas y Naturales de Madrid, disertando sobre: El saber positivo y el progreso humano. Tambien ejerció como Tesorero de la Academia, desde 1921 a 1938.
Por su contribución a la ciencia y a la sociedad le valió la temprana concesión, en 1923, de la Gran Cruz de Isabel la Católica.[2]
Fue Presidente del Consejo de la Mineria (1932–1933), puesto en el que se jubiló.
Retiro y muerte
Aún tras su jubilación colaboró con el Instituto Geológico de España:
Murió exiliado en París en 1938.
Referencias
- ↑ Cayón, Francisco (2001). La introducción de la tecnología eléctrica en España del siglo XIX: Un análisis a través del sistema de patentes.
- ↑ Boletín Oficial de Minas, 78, p. 21, nov. 1923
- ↑ López de Azcona, Juan Manuel; Meseguer Pardo, Jose. Contribución a la historia de la geologia y minería española; Instituto Geológico y Minero de España, ed. Madrid: Instituto Geológico y Minero de España, IGME, 1964
Muerte
- El ingeniero e inventor Enrique Hauser y Neuburger (1866–1938): apuntes biográficos. Disponible en: http://oa.upm.es/10011/1/llull_25.pdf. Consultado el 20 de julio de 2021.
