Regla
| Municipio Regla | |
|---|---|
| Municipio de Cuba | |
| Ubicación del Municipio Regla Ubicación del Municipio Regla | |
| Entidad | Municipio |
| • País | |
| • Provincia | Ciudad de la Habana |
| • Fundación | 3 de marzo de 1687 |
| Superficie | |
| • Total | 9 2 km² |
| Población | |
| • Total | 42 939 hab. |
| • Densidad | 4 667 hab/km² |
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Regla. Uno de los municipios de la provincia de la Ciudad de la Habana. Su historia se remonta al siglo XVI y al siglo XVII respectivamente, lo que demuestra la existencia de una personalidad propia, avalada por un largo decursar en el tiempo.
El nombre autóctono del pueblo llamado más tarde Nuestra Señora de Regla, es Guaicanamar, cuyo significado es "frente al mar", según plantea Eduardo Gómez Luaces, extinto historiador de Regla.
El Municipio de Regla, considerado en la actual división política administrativa como periférico, cuenta con dos asentamientos urbanos compactos, formados por las comunidades de Regla y Casablanca, ambas perimetralmente muy definidas, unidas por la Ensenada de Marimela donde se encuentran ubicadas las instalaciones de la Refinería Ñico López.
El Municipio de Regla consta de 9,2 kilómetros cuadrados con una población de alrededor de cuarenta y tres mil habitantes, el área urbanizada es del 41%, el resto del territorio es ocupado por instalaciones portuarias, industriales, militares y áreas verdes.
Historia
La historia de Casablanca y Regla se remonta a los siglos XVI y XVII respectivamente, lo que demuestra en ambos casos la existencia de una personalidad propia, avalada por un largo decursar en el tiempo, que inevitablemente motiva una interpretación plural a la hora de realizar cualquier análisis desde una óptica municipal.
Casa Blanca, tienen un origen indefinido. Su pueblo comenzó a fomentarse desde el año 1589, cuando en esa parte del litoral de la bahía, se construyó por la Real Hacienda, un depósito para guardar los objetos que no cabían en los almacenes de La Habana. Según se cuenta, el edificio siempre estuvo pintado de blanco y a fuerza del uso y la costumbre, aquella "casa blanca" fue bautizando esa región.
Los que viajaban por mar hacia allí le decían al botero que lo llevaran a Casa Blanca, lo que ha llegado hasta hoy con su nombre y sus más de 4 siglos. Regla, cuyo nombre autóctono fue Güaicanamar, que significaba "frente al mar", pertenecía al cacicazgo indio de Guanabacoa (lugar de las aguas).
Desde el 27 de febrero de 1573 se conocía la existencia de un caserío de indios, sin embargo se toma como referencia a la hora de hablar de su surgimiento el 3 de marzo de 1687, cuando el Marqués de la Real Proclamación, Don Pedro Recio de Oquendo, dona al peregrino Manuel Antonio, natural de Perú, un pedazo de tierra para la construcción de una Ermita a La Virgen de Regla. Posteriormente, alrededor de la misma, comenzaron los asentamientos humanos, que en su constante ampliación y desarrollo en el tiempo, dieron origen al patrimonio actual de la región. Es por ello que esa fecha se considera como punto de partida de la fundación de Regla
Comunidad Primitiva
Guaicanamar pertenecía al cacicazgo indio de Guanabacoa, en el Siglo XVI Antón Recio casó con la Gaditana Catalina Hernández y este casamiento dio lugar a la fundación del primer mayorazgo de Cuba, por lo tanto, constituyó Antón Recio una de las personalidades más importantes en la historia de Cuba y de la Villa de Regla.
Según Gómez Luaces ya el 27 de febrero de 1573, se conocía de la existencia en el Hato de Guaicanamar, de un caserío de indios - pre-agroalfareros - situado en la ribera opuesta de la Habana, donde hoy existe el pueblo de Regla. La presencia de aborígenes en nuestro territorio se ha estudiado y con relación a esto se plantea que:
La configuración geográfica de Regla, otrora Guaicanamar, quinientos años atrás estaba caracterizada por riberas con presencia de grandes extensiones de mangles y ciénagas pobladas de aves y crustáceos, orillas rocosas o playas de arenas limpias. Más arriba crecía el monte firme, grandes y frondosos árboles que cubrían el suelo, un poco más allá, estaban las colinas, donde había presencia de árboles frutales que servían como parte del sustento de los nativos. A ésta configuración hay que agregarle la corriente de varios ríos y arroyos, conocidos hoy como Río Martín Pérez, el Arroyo Tadeo y el Río Luyanó, entre otros pequeños arroyuelos que actualmente han desaparecido.
También tomamos como fundamento la existencia de un gran cacicazgo en el norte de la Habana- el de Habaguanex - así como los residuarios encontrados en el litoral norte y este de la Bahía (presentes en la Colección arqueológica del Museo de Regla).
Un importante elemento está en la fuerte población aborigen en territorios de Guanabacoa, cuyo número llegó a ascender a trescientos, esta proximidad nos lleva a plantear un posible trasegar de uno a otro lado en busca de alimentos para el completamiento de la dieta, la cual estaba en el mar, en la costa o en el ecosistema del mangle compuesto por crustáceos, peces y mariscos que existía en todo el litoral de Regla y Casablanca y donde todavía persisten huellas de este tipo de vegetación, como son los pequeños reservorios de mangles, caracoles y peces.
Esta tesis sobre la presencia aborigen en Regla cobró mayor veracidad después de la exploración de superficie efectuada por un grupo de aficionados de la Academia de Ciencias nombrado Crabimo, el 8 de enero de 1980, en áreas de la Punta San Antonio, en la Ensenada de Guasabacoa, en la Bahía de la Habana. En el informe presentado por este grupo se expresa que fueron encontrados restos de dieta alimentaria como ostiones, isognomas, americardias, chama, sigua, longorom, strombus, gigas, coral, etc.
El sitio aparece descrito de la siguiente forma:
"El montículo está enclavado en la zona de Cayo Cruz y presenta una extensión de 40 metros en su eje mayor y 15 metros en su eje menor, la base del residuario es bañado por las aguas tranquilas de la Bahía "
La base material encontrada está compuesta por elementos provenientes de la zona costera y del mangle, los cuales además de servirles como base alimentaria, podían ser utilizados como instrumentos de labor rudimentarios.
Colonia
Origen de los nombres de Regla y Casablanca
Entre 1596 y 1598 fue fundado un ingenio: "San Pedro de Guaicanamar", el primero en Cuba movido por tracción animal, en la profundidad de la Ensenada de Marimelena, al Este de la Bahía de la Habana, (en Casablanca).
El 21 de julio de 1662, con permiso del Mayorazgo, se le dio concesión al Alférez Don Jacinto Cabrera para sembrar maíz, cacao, trigo y pastar sus vacas en Guaicanamar, este hecho nos permite inferir que Cabrera trajera sus esclavos para los menesteres de sus actividades y junto a él a otras personas, contribuyendo de este modo a incrementar la población y ampliar la actividad económica de la zona, en la que ya se venía sembrando caña de azúcar por parte de la dotación del Ingenio Guaicanamar.
Se ha tomado la fecha de fundación del territorio por el documento firmado por Pedro Recio de Oquendo el 3 de marzo de 1687, en el que éste hace donación "... de una punta de tierra mía en frente de un cayo que ciñe el mar hasta el embarcadero de Camaco de la banda que mira a la banda de Marimelena..." a instancias de un personaje conocido por Manuel Antonio "El Peregrino" (natural de Lima, Perú) quien se proponía erigir una ermita a Nuestra Señora de Regla. En este lugar se adoró un cuadro pintado al óleo de la Virgen, hasta que en 1694 el castellano Jefe de la Fortaleza Militar de la Punta Don Pedro Aranda de Avellaneda, el 8 de septiembre, trajera de España la imagen que hoy se venera.
Con el transcurso del tiempo aumentó la devoción, se fue desarrollando el culto a esa imagen, haciéndose fiesta anual el 8 de septiembre y es así como fue creándose el hábito de llamar a este pueblo Regla.
El territorio de Regla y Guanabacoa, había sido ordenado por Felipe II, como el reducto de Indios de Occidente, pero posteriormente el Rey Felipe IV dictó una Real Orden el 27 de enero de 1632, donde se echaban abajo las Mercedes dadas a Don Diego Miranda, dejando de paso sin efecto también la escritura del Primer Mayorazgo o título de nobleza que se le otorgara en Cuba a Antón Recio Castaño, desde el 11 de julio de 1568 y por la que se le concedían las Estancias de Camaco y Potosí, donde están situados los pueblos de Regla y Guanabacoa. Estas Mercedes fueron nuevamente legitimadas por la Real Orden del Rey Fernando VII el 11 de marzo de 1824 y se otorgaban por los Ayuntamientos de Cuba, por ello el 31 de mayo de 1890 la Viuda del Marqués de la Real Proclamación, heredero del Mayorazgo de Antón Recio, verificó la inscripción de los bienes desde que su esposo los heredó hasta que falleció (31 de agosto de 1839 - 6 de Julio de 1882.)
Finalmente los terrenos inscriptos fueron 19 caballerías y 221 cordeles, equivalentes a 257 hectáreas y 59 centiáreas, de las cuales correspondían al término Municipal de Regla 46 hectáreas, 70 áreas y 16 centiáreas; el resto, al término Municipal de Guanabacoa.
Por otro parte, desde 1589, en Casablanca, “ se construyó por la Real Hacienda un depósito para guardar los objetos que no cabían en los Almacenes de La Habana. Según cuenta la tradición, ese edificio siempre estuvo pintado de blanco. Los que tenían que viajar a esta parte de la bolsa habanera decían al botero:”Lléveme a la Casa Blanca.” A fuerza del uso y la costumbre, quedó bautizado de por vida y así llegó el nombre de este pueblo hasta nuestros días...”
Geografía
La componen, geográficamente, dos regiones bien definidas enlazadas por tierra y por mar: Casablanca y Regla.
Con una extensión territorial total de 9,2 Km2, colinda al norte con Habana del Este, al sur con San Miguel del Padrón, al este con Guanabacoa y al oeste con Habana Vieja.
Desde el punto de vista político administrativo, está dividida en tres Consejos Populares, Güaicanamar, Loma - Modelo y Casa Blanca con
Una población total de 41 151 habitantes, la mayor parte radicada en la zona reglana del municipio y con un balance bastante parejo entre ambos sexos.
Límites geográficos
- Norte: Municipio de Habana del Este.
- Sur: Municipio de San Miguel del Padrón.
- Este: Municipios de Guanabacoa y de Habana del Este.
- Oeste: Municipio de Habana Vieja.
Clima según el Instituto de Meteorología, Estación de Casablanca.
- Humedad relativa: 78%
- Precipitación total media: 1,112 mm
- Temperatura: 24,6 C. (promedio)
Relieve
Regla es una península que penetra en la Bahía de la Habana, en cuyas riberas crecía el mangle con el que se construían embarcaciones menores. Su suelo está formado por capas secundarias de piedras de cal, yeso y dos formaciones de arenisca, de las cuales una es la caliza blanca y la otra piedra de cantería roja y arcillosa. La colina existente entre Regla y Guanabacoa está constituida por piedra serpentina, cuyas capas regularmente inclinadas al norte y al noroeste, descansan cerca de Marimelena, sobre roca bastante rasa. La serpentina es blanda, pero profundizando se encuentra piedra dura que ha servido para terraplanear los lugares pantanosos del pueblo.
Educación
En la actualidad el Municipio de Regla cuenta con 30 centros educacionales cubriendo todos los niveles de enseñanza, desde Círculos Infantiles hasta el nivel de Politécnico, Facultad Obrera y Escuela de Idiomas, así como un Palacio de Pioneros. Además ya existe una Filial Municipal Universitaria y la Universidad el Adulto Mayor.
En el Siglo XX el Municipio contó con muchos educadores a quienes debemos recordar de forma imperecedera y entre ellos tenemos al Dr. Carlos González, la Dra. María Teresa Cardona, el Profesor Mario Puga, la Profesora Rosario Fernández y a todos aquellos que cuando el llamado de la Alfabetización acudieron a cumplir con el más importante acto de libertad que ha tenido la Revolución porque dio la oportunidad a todos de aprender a leer y a escribir y llevar a la práctica el pensamiento del Maestro José Martí "... todo hombre tiene derecho a que se le eduque... y en pago contribuir a la educación de los demás..."
La alfabetización constituyó el primero y mas importante hecho cultural de la Revolución y por lo tanto todo el proceso educativo del país ha sido proyectado con una visión totalmente integral en la formación de la ciudadanía, por eso en éste proyecto no ha estado ajeno el sistema de instituciones culturales creado por la Revolución y en cuál los Museos juegan un papel importante ya que a ellos corresponde la preservación , estudio y divulgación del patrimonio municipal y nacional, la Biblioteca en el trabajo de la campaña por la lectura, la Casa de Cultura en la formación de las habilidades de los niños y jóvenes en las distintas manifestaciones artísticas y en la labor de desarrollar el movimiento de aficionados de la comunidad.
Cultura
Artes plásticas
Tienen su lugar dentro de la historia cultural de este pueblo, esencialmente a partir de la década del 40 (siglo XX) con figuras importantes como Frémez (grabador), Luis García Fresquet, "Chamaco" (dibujante humorístico y cartelista), Carmelo González (fundador de la asociación de Grabadores de Cuba y además pintor), Enrique Almaguer (pintor), Ernesto Gotario (pintor y caricaturista), Antonio Canet (grabador) y Lázaro Calvo (escultor), actual Presidente de la UNEAC en el territorio.
También tiene una destacada labor Zomnia Miranda, diseñadora, pintora, artesana, restauradora e instructora de artes plásticas del grupo "Corazón" de la Casa de Cultura "Roberto Faz".
Danza
Al tener este municipio una relación directa con la música por naturaleza propia, también desarrolló sólidas bases en la cultura popular. Sus orígenes se remontan a los cabildos lucumíes y de otras denominaciones étnicas que comienzan en la primera parte del siglo XIX y se fortalecen en la segunda mitad, coincidiendo con la inauguración de sociedades como el Liceo Artístico y Literario (1879), el Casino Español (1881) y la Sociedad Juan Gualberto Gómez (1897) para negros y mulatos, donde los bailes de salón comienzan a cobrar fuerza (algunos han trascendido los marcos de aquella época para convertirse en verdaderas tradiciones como "Las Flores" y el "Noche Azul"), que se ofrecen cada año en el Liceo, formando toda una cultura danzaria alrededor fundamentalmente de la música popular cubana que ha dado como frutos la aparición de varias generaciones de reconocidos buenos bailadores.
Figuras de la talla de Margarita Ugarte en el género folklórico y de reconocidas agrupaciones como Los Guaracheros y Guaracheritos de Regla junto con todo un movimiento de comparsas infantiles que nutren escalonadamente a los dos primeras, fusionan todo un legado que en esta dirección aportaron lo africano y lo popular en el terreno danzario.<b
La comparsa Los Guaracheros de Regla creada en 1959 es heredera de la tradición danzaria que posee el municipio, como lo demuestra la existencia de comparsas reglanas desde las primeras décadas del siglo XX entre las que se encuentran las nombradas "Los Moros azules", "Los Marineritos", "Los colegiales". "Los guaracheros de Regla" surgen como una muestra de alegría de jóvenes reglanos por la caída del tirano Batista y el advenimiento de la Revolución. Humberto Medina, su director y uno de los fundadores, es hijo de Cuco Medina quien creara la comparsa "Los guaracheros" en 1924 que aunque salió sólo un año es el antecedente directo del actual.
Los guaracheros de Regla fueron organizados para representar al municipio en las fiestas carnavalescas y este proyecto de manifestación de alegría de los jóvenes reglanos ha permanecido y posee un aval inmenso por las numerosas presentaciones que en múltiples eventos nacionales y en el extranjero han participado.
Grupos danzarios aficionados
- "Los Guaracheros de Regla"
- "Los Guaracheritos de Regla"
- Grupo Infantil "Futuro
- Grupo Infantil Danzario "Garoe"
- Grupo Infantil "La Chunguita"
- Grupo infantil "Logros de mi barrio"
- Grupo infantil "Destellos"
Teatro
El teatro, aunque en menor medida también ha contado con la presencia reglana fundamentalmente en el terreno radial y televisivo. Magaly Alou, Carlos Otero, Manolo Melián, Coralita Veloz y el crítico y director de programa Vicente González Castro, son nombres que no pueden faltar.
Literatura
Por derecho propio, ocupa también destacados espacios en el panorama cultural de Regla. Desde que aparecieron las primeras publicaciones locales en el siglo XIX, comenzó a generarse todo un movimiento en el campo literario.
De aquellos años puede mencionarse "La voz de pueblo cubano" (1852) órgano de la independencia de Cuba, que dirigido por Juan S. Bellido de Luna aportó en la figura del tipógrafo Eduardo Facciolo Alba el primer mártir de la prensa en Cuba; El Progreso" (1858), órgano de la Sociedad de Declamación y Filarmonía "Nuestra Señora de Regla"; "La Luz", semanario económico literario dirigido por Alfredo Torroella y "El Clarín" (1899) periódico local independiente con frecuencia semanal. Periodistas importantes dentro de la localidad en aquella época fueron Alfredo Torroella, Juan E Clark y Mascaró, Francisco M. Duque, Serafín Martínez Mary, Rafael Fernández de Castro, Jaime Mayol Martínez y Manuel Cádiz.
Este hecho recibió un impulso significativo con la inauguración del Liceo Artístico y Literario el 8 de febrero de 1879 que precisamente tenía dentro de sus propósitos crear un espacio para el intercambio cultural. No fue entonces casual la presencia allí del Apóstol para pronunciar su primer discurso político sino un producto del prestigio ya alcanzado entonces por la intelectualidad reglana de aquella época. Posteriormente José Martí visitó Regla en varias ocasiones más.
Otras de las grandes figuras de la literatura que se sintió atraída por la atmósfera que intelectualmente se respiraba fue la insigne poetisa cubana Luisa Pérez de Zambrana, a tal punto que se estableció aquí desde el principio de los 90 hasta su fallecimiento el 25 de mayo de 1922.
El siglo XX mantuvo en su primera mitad un buen ritmo en cuanto a las publicaciones locales. Entre las más relevantes se puede señalar la "Revista Quincenal" (1905), órgano oficial de la Logia Masónica; "Regla ilustrada" (1905), revista semanal; "El Pregonero" (1907), semanario y "El Observador" (1943), mensuario, luego quincenario, cuyo director fue Eduardo Gómez Luaces. Como figuras destacadas en el género periodístico se puede mencionar a Ismael A. Clark, Miguel Coyula, Jaime Mayol, Manuel Cádiz, José B. Roca, Florencio Balbuzano, Fidel y José Fiol Bauza, Serafín Martínez, Eduardo Gómez Luaces y Vicente García. La segunda mitad del siglo ha tenido altas y bajas en el desarrollo de esta manifestación. Después de un descenso en los años 60 y 70 por razones de orden material que afectaron las publicaciones locales, tuvo un repunte en los 80 con la creación de los Talleres Literarios y la salida de las revistas "Guaicanamar" y "Tocororo", los cuadernos "Aniversario" y otros.
Principales eventos:
- Encuentro municipal de estudios socioculturales
- Concurso literario "Luisa Pérez de Zambrana"
- Coloquio Intermunicipal
Música. Para referirse a la historia musical de este pueblo, es necesario remitirse a la segunda mitad del siglo XIX dentro del contexto de las tradiciones religiosas de origen africano en la que la música ocupaba un lugar destacado.
Su posterior difusión y mezcla con otros sectores y culturas al paso de los años dio origen a la formación de toda una tradición que produjo verdaderas luminarias de la cultura nacional en varios géneros de esta manifestación, fundamentalmente a lo largo del siglo XX.
Nombres como los de la Familia Romeu, Antonio Alcaño, Roberto Faz, El dúo Clara y Mario, los creadores Tania Castellanos y Juan Arrondo, Coralia Fernández, Pancho Majagua, El conjunto "Los Latinos" y Sergio Farías, por solo citar algunos, dan una muestra significativa de lo fértil que ha sido para esta manifestación artística esta región.
Tradiciones
Liceo de Regla
Realización de bailes, donde los más populares y antiguos son el "Baile de las Flores" (mayo) y el "Noche Azul" (septiembre). También tiene una exposición permanente sobre su historia en el salón principal y en él se realiza la Bienal de Artes Plásticas "Salón Orlando Suárez", auspiciada por la sociedad.
Otras tradiciones
Festejos de la Fundación de Regla, Fiesta Patronal de la Virgen de Regla, Fiesta Patronal de la Virgen del Carmen, Peregrinación a la Colina Lenin, Fiesta del Mar, Caminar por la calle y no por la acera, fundamentalmente en la calle Martí, Peregrinación a los Mártires de Regla, Desfile martiano del 28 de enero, Homenaje a Mella, Béisbol y Dominó.
La lanchita de Regla
En el "Emboque de Regla", después que el pasajero pagaba el pasaje y pasaba el torniquete, se dirigía al "muellecito" y allíi contemplaba todo un espectáculo. Unos muchachos en el agua pedían que les tiraran alguna moneda. La gente, generalmente, les arrojaban un "kilo prieto" (moneda americana de un centavo) y se las tiraban algo distante.
El nadador se zambullía y a los pocos segundos reaparecía en la superficie mostrando el "kilo" capturado, el cual inmediatamente se lo guardaban en la boca. Después de ver esto, el pasajero abordaba la lancha del "Muelle de Luz" para Regla, también se podía contemplar, en medio de la bahía algo insólito: En muchísimas ocasiones el conductor tenía que encaramarse en el techo de la lancha para poder cobrar, porque ésta venía atestada de pasajeros. También muchos viajaban a babor y a estribor "enganchados" de un tubo que rodeaba el techo. En fin, que se viajaba dentro de la lancha, en los costados y en el techo.
La Virgen de Regla
San Agustín el Africano, Obispo de Hipona, que nació en Tagaste, África, y vivió por los años 360 al 436, ordenó tallar la figura de la virgen con el color negro, de acuerdo a la tez de los africanos. Este fue un padre muy culto, hasta considerarse uno de los más prolíferos en el campo de las letras.
Él había tenido una revelación: un ángel le había vaticinado que debía ser tallada en madera la esfinge que luego debía colocarse bien adornada en su oratorio, instrucciones que el padre siguió al pie de la letra. Se dice que el obispo utilizó la mejor madera de cedro que pudo encontrar. Al parecer los siglos le han borrado el nombre puesto por San Agustín, que parece probable fuera el actual de la santa imagen.
Después del saqueo de Tagaste, el diácono llamado Cipriano, salvó a la virgen, pasando con esta por una tormenta a través del Estrecho de Gibraltar, el hecho se considera el primer milagro de La virgen de Regla. La tradición se encargó de hacer a la virgen "Patrona de los marinos", como consecuencia de haber traído a la embarcación salva a pesar de la tempestad. Cipriano llegó luego a Cádiz, España, villa de Chipiona, donde está el santuario de la Virgen de esta villa y entregó su carga al prior del convento de Ermitaños de San Agustín, los árabes estuvieron varios siglos en esa parte de España y el prior no pudo jamás ver a la sagrada figura en su altar, murió y llevó a la tumba su secreto.
En el año 711, una invasión amenazó a la santa, debido a la presencia árabe en Andalucía, pero la esfinge había sido escondida hábilmente en un pozo cercano. En 1330, un canónigo del Convento de Santa María de Regla, la encontró, durante un paseo que realizaba en compañía de unos labriegos.
El encuentro se produjo porque el canónigo había soñado que una gran señora de rostro negro, le mandaba ir a orillas del mar gitano a rescatarla:“Debajo del árbol, en que reposas, está lo que afanosamente buscas” decía la revelación. Don Joaquín Ponce de león, señor feudal de Chipiona, cedió su castillo como monasterio de culto a la imagen. De esta virgen solamente quedaron cabeza y tronco.
En 1590 toda la esfinge fue cubierta por una chapa gruesa de plata a modo de armadura, en que sólo la cabeza quedó descubierta. A partir de 1687, y hasta 1696, en Regla se adoró una imagen representada por un cuadro pintado al óleo, pero ese último año el castellano Don Pedro de Aranda y Evellaneda, donó al santuario la escultura que había traído en su primer viaje a España. Desde el momento en que la ermita de la virgen de Regla estuvo al pie, se ramificó el espíritu público de su devoción se convirtió en foco de piedad, y venían personas desde los más apartados lugares a rendirle homenaje. La devoción crecía más y más. En 1708 se agregaron a la iglesia dos altares, por no dar abasto el que había para las misas. El 14 de diciembre del propio 1708, se juró la virgen de Regla como Patrona de la Bahía, y se depositó la llave en sus pies, que simboliza la Ciudad de San Cristóbal de La Habana, por el Regidor Decano de ese Cabildo. Sin dudas fue una época de gran triunfo para el santuario, aunque nada existía en Regla: ni los almacenes, ni las murallas, todo estaba desierto en los terrenos de Guaicanamar donde hoy se lavanta el ultramarino pueblo reglano, sólo algunos cuartos para hospedar a los devotos a continuación de la iglesia.
La virgen como signo de la localidad
En 1717 el Sacramento se hizo con tal solemnidad, que se adicionó 8 días consecutivos de fiesta y regocijo, y en 1734, se fundó la hermandad de la Concordia de Nuestra Señora de Regla concediéndosele a los devotos inscritos en ella, gracias e indulgencias.
El origen de Regla está ligado a la virgen: Zeferina, la tuerta, de 70 años, que pidió en 1737 licencia a los dueños del terreno para construir un bohío cerca del santuario, y vender cazuelas y carnes a los que venían de romería para su culto. Fue esta acción la que atrajo a un buen número de vendedores e hizo fundar el pueblo, luego marítimo y comerciante. La actual iglesia se construyó en 1811, en Septiembre, Gonzalo Herrera fue el padrino, aunque en 1818 se terminaron de construir la torre y el frontis, gracias a la obra del matemático Pedro Abad Villarreal, y el alarife Don Pedro Justiniani.
Queda así demostrado que alrededor del santuario se improvisó un pueblo: se veían negras confeccionando dulces y otros alimentos para expender a los que venían a la feria, se mataban animales como ofrendas, y se distribuían, todos participaban en comunidad, el capellán hospedaba a los podóa, se ponían mesas para los devotos de Nuestra Señora de Regla, y ella tomaban parte altas notabilidades de la ciudad, y los habitantes circunvecinos de la bahía.
Se sabe que en 1762, con motivo del ataque de los ingleses, el capellán tuvo que trasladar la imagen de Nuestra señora de Regla y sus alhajas a la iglesia del Calvario, llevándolas personalmente en su cabalgadura. Dos días después volvió a trasladarla al ingenio de San Diego Marrero en Managüa, allí estuvo doce días. Al decir de José Rafael Garrucho Ambrón los ingleses ocuparon la iglesia con sus fuerzas.
Salud Pública
Ningún momento de la historia de la salud en el territorio alcanzó los niveles que conoce el Municipio en la actualidad, solo con el triunfo revolucionario se alcanza un nivel lo suficientemente capaz de responder a las necesidades de la población y podemos ejemplificar con los siguientes datos:
Para una población de más de 44 mil habitantes se cuenta con 1 Posta médica de Urgencia con cinco servicios básicos y 9 Consultorios de Médicos de la Familia en Casablanca, 65 Consultorios del Médico de la Familia en Regla y una Posta Médica de Urgencia, un Centro Comunitario de Salud Mental (Centro de Referencia Nacional), un Hogar Materno, una Casa de los Abuelos, un Policlínico que brinda 38 servicios después de su reparación en el 2003, encargados de cubrir las necesidades de todo el Municipio.
Economía
Además de los negocios de abastecimiento local y empleos relacionados con el puerto de La Bahía de La Habana, el Municipio de Regla estaba sumamente industrializado a finales de la década de 1950. Tenía grandes fábricas de tejidos, muchas fábricas de zapatos ya establecidas en el mercado internacional, también otras industrias como de perfumes y varias en el procesamiento de alimentos con distribución nacional ya desarrollada y perspectivas de ir al internacional.
Desarrollo Económico
Regla desde su origen ha sido un pueblo eminentemente industrial y por tanto obrero. Por su magnífica situación junto al puerto de la Habana, su desarrollo ha sido ininterrumpido y por supuesto fue un territorio ideal para los inversionistas y explotadores de todo tipo.
INdustrias de mayores dividendos
Primeramente las del sector azucarero, fábricas de envases, barriles, bocoyes y cajas, en segundo lugar los almacenes para acopiar esos azúcares de las provincias occidentales, en tercero la industria naval con sus careneros, varaderos y diques secos para la construcción y reparación de todos los buques, de madera primero y más tarde de hierro.
El historiador Eduardo Gómez Luaces señala que “... nuestro pueblo al estar situado en la Bahía de La Habana, trajo como secuela la organización de industrias marineras, de artesanía y comercios varios..”, ( ) en el siglo XVIII el incremento del transporte de pasajeros y de mercancías, con las actividades incipientes de reparaciones y construcciones de pequeñas embarcaciones y el comercio hicieron que las autoridades comenzaran a preocuparse y a establecer controles sobre las diferentes fuentes de ingresos.
“...la península reglana estaba cubierta de varaderos o careneros, diques y astilleros, fábricas de envases, alambiques, destilerías...” ( ), esto continúa en ascenso durante el siglo XIX
Todas estas industrias se situaron en el litoral, a pesar de la Ley de las ocho varas al margen del mar y de los ríos, que nunca se cumplió, puesto que todo aquel con posibilidades económicas e influencias, terraplenó los inmensos espacios cubiertos de mangle, que representaban miles de metros frente al mar en el puerto comercial de Cuba.
En 1873,según documento del Ayuntamiento de Regla sobre “La Nomenclatura y clasificación de los establecimientos de industrias y comercios, artes y oficios” que pagaban impuestos al Ayuntamiento se alcanzaba la respetable cifra de 106 industrias, comercios y otros establecimientos.
Ejemplos de la actividad industrial, de comercio y servicios lo constituyen:
1792. - Muelle y carenero para reparación de buques menores en Casablanca.
1815. - Fábrica Inglesa de Jabones, en Casablanca.
1837. - 1ra Empresa de Vapores de La Bahía.
1844. - Almacenes de Regla o del Quinto
1849. - Fábrica de clavos.
1857. - Almacenes de Santa Catalina
1860. - Fábrica de gas, conocido como “Gasómetro”.
1867. - Refinería Belot
1868. -Talleres “La Marina”
1874. - Fabrica de jabones en Regla
Talleres de Gamiz, en Casablanca.
Talleres de José Triscornia
Fuentes
Sitio de la cultura de Regla y Guanabacoa

