Iglesias románicas catalanas del Valle de Boí
| Iglesias románicas catalanas del Valle de Boí | |
|---|---|
  Nombre descrito en la Lista del Patrimonio de la Humanidad. | |
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| Coordenadas | N42 30 17 E0 48 13 |
| País |  España |
| Tipo | Cultural |
| Criterios | (ii)(iv) |
| N.° identificación | 988 |
| Año de inscripción | 2000 (XXIV sesión) |
| Lugar de celebración | Provincia de Lleida, Comunidad Autónoma de Cataluña |
Las Iglesias románicas catalanas del Valle de Boí, están enclavadas en los altos Pirineos, en la región de Alto Ribagorça, y rodeadas por montañas empinadas. Cada aldea en el valle tiene una iglesia románica, rodeada por campos cercados. Este grupo de iglesias fueron incluidas en la Lista del Patrimonio de la Humanidad de la UNESCO en el año 2000.
Descripción
Las iglesias del Vall de Boí son especial ejemplo de arte románico en una localidad rural virtualmente intacta. El grupo de iglesias es un ejemplo notable de un estilo de construcción importante en la historia humana, basado en el arte románico, al que contribuye con características apropiadas a lo religioso y lo secular. El Valle de Boí ilustra la ocupación continua de un área de la tierra. Las iglesias que eran fabricadas en la Edad Media por una familia sencilla, simbolizan la afirmación y establecimiento geográfico en el tiempo histórico en que Cataluña era creada. El Valle de Boí esta escudado por los picos altos del macizo de Beciberri/Punta Alta, en los altos Pirineos. Su escenario es boscoso y de praderas, juntando y rodeando las aldeas pequeñas. La invasión árabe de la península ibérica nunca penetró los valles, pero fueron expuestos alrededor del comienzo del 2do. milenio a las influencias culturales traídas allí por comerciantes, monjes ambulantes y peregrinos cristianos de viaje a Jerusalén y Santiago de Compostela. En el siglo XI, nuevos estilos culturales vinieron a Cataluña desde Italia, particularmente Lombardía. Este nuevo movimiento cultural se extendió por todo el Valle de Boí. El número excepcional de iglesias románicas en el valle es atribuido al hecho de que entraron a la región grandes cantidades de plata.
Barruera está localizado donde el Valle de Boí se ensancha al exterior. La aldea se extiende a lo largo del camino romano principal. Su iglesia parroquial de San Feliú yace fuera de la aldea, inmediatamente sobre el área de inundación de río.
Santa Juana se encuentra en el centro fortificado de Boí, en el camino antiguo, guiando hacia un establecimiento romano termal. Ella se sitúa a la derecha del banco del río de San Martí, entre dos afloramientos rocosos en el centro del valle. Los tres campanarios de Boí, Taüll y Valle Vall son visibles entre sí, una característica defensiva notable. La iglesia de Santa Juana sufrió una alteración considerable en el siglo XVIII. Taüll es una aldea en una ruta medieval, con la iglesia de la Santa María, con varias casas medievales, y un espacio alargado a lo largo de la dirección de ruta vieja a San Clemente. Sus iglesias son generalmente reconocidas por ser los arquetipos del valle del estilo románico de Boí: la iglesia parroquial de la Santa María está decorada detalladamente en estilo prestamista y tiene un cementerio debajo del pavimento fuera de la pared meridional. La iglesia de San Clemente es la más grande; su arquitectura y decoración de interiores prestamista característica hace de ella el símbolo de arquitectura románica catalana. Su característica más imponente es su campanario: un rectángulo en proyecto y vuelo alto de un sólido simulado la base a seis historias. La iglesia de Coll yace fuera de esta pequeña aldea. Ella es básicamente románica con elementos góticos en las adiciones y transformaciones posteriores. El ruinoso campanario gótico es de cuatro historias de alto. La Santa María en Cardet, está construida en una eminencia rocosa dominando la entrada al Valle de Boí. El esquema y desarrollo de la iglesia parroquial, a pesar de su tamaño pequeño, es complejo. Singularmente en este valle, una cripta ocupa el espacio debajo del ábside creado por la necesidad de mantener esta última horizontal como la roca. La fachada contiene ciertos elementos interesantes que cubren un período relativamente largo de diseño medieval. La iglesia de la Natividad, en Durro: los edificios de esta aldea pequeña, construidos en una ladera de guarnición meridional, se extienden por encima de la iglesia parroquial de la Natividad a lo largo de la calle medieval sencilla. Sólo su interior se ha renovado en tiempos modernos.
Un camino sinuoso lleva a la ermita de San Quirc de Durro, situada en un pico bajo a una altura de 1,500 m. Es una iglesia pequeña con un cubo de rueda y ábside sencillo con una estructura de campana pétrea. Existe un techo espacioso accesible sólo del exterior, que sirvió probablemente de granero y cuarto de almacenar. Es muy típico de ermitas medievales pequeñas en la región pirenaica.
La de Valle Erill es un establecimiento muy pequeño, con cuatro conjuntos domésticos de forma característica. La iglesia de la Santa Eulalia tiene un cubo de rueda largo sencillo, con un techo de madera, que reemplazó una bóveda cilíndrica anterior.
Justificación para inscripción
- Criterio (II): Los desarrollos significativos en el arte románico y arquitectura en las iglesias del Valle de Boí, testifican el intercambio cultural a través de Europa medieval, y en particular, a través de la barrera montañesa de los Pirineos.
- Criterio (iv): Las iglesias del Valle de Boí son un especial ejemplo del arte románico en una locación rural virtualmente intacta.
