Simón Iturri Patiño

Simón Iturri Patiño
Información sobre la plantilla
Simón Iturri Patiño 1.jpg
Simón Iturri Patiño – Un Magnate Boliviano
NombreSimón Iturri Patiño
Nacimiento1 de junio de 1860
Santiváñez, Cochabamba. Bandera de Bolivia Bolivia
Fallecimiento20 de abril de 1947
Buenos Aires, Bandera de Argentina Argentina
NacionalidadBoliviana
CiudadaníaArgentina
OcupaciónEmpresario
CónyugeAlbina Rodríguez

Simón Iturri Patiño. Empresario minero boliviano que fue uno de los grandes barones del estaño y probablemente la figura más destacada en el ámbito de las grandes compañías mineras que dominaron la economía boliviana durante buena parte del siglo XX. Casado con Albina Rodríguez en 1889, tuvieron dos hijas y un hijo.

Sintésis biográfica

Nació en el Departamento de Cochabamba. De origen humilde , tras una experiencia comercial se trasladó a Oruro, un importante centro minero boliviano, cuando la explotación de la plata estaba en su punto culminante, captó muy pronto que los yacimientos de plata se estaban agotando y, presintiendo cuáles serían las próximas necesidades de la industria, se puso en busca de otros filones, y en particular de estaño.

Trayectoria laboral

Comenzó su actividad laboral en 1883 como empleado de una casa comercial de la localidad de Cochabamba. Años más tarde, en 1894, se trasladó a Oruro para incorporarse a la empresa Germán Fricke y Cía., que se hallaba en aquel momento en plena expansión.

Su interés por la actividad minera se despertó en aquellos años y, en 1895, estableció una sociedad con los responsables de la mina La Salvadora. Este yacimiento, situado en el departamento de Potosí, en el cerro Llallagua, se convirtió en 1900 en una de las reservas de estaño más importantes del mundo al descubrirse en su interior una gran veta.

Tras varios años de arduas búsquedas, aislado en la montaña con su esposa, sus tenaces esfuerzos tuvieron éxito y descubrió uno de los principales yacimientos de estaño conocidos. De ahí en adelante empezó a dar rienda suelta a su genial sentido de la organización. En pocos años hizo de su mina la más importante del país, explotándola con las técnicas más modernas bajo la dirección de los mejores ingenieros extranjeros.

Su fortuna

Con su habitual lucidez empresarial, pudo ver que la hora de la fortuna le había llegado: se estableció en Oruro, fundó el Banco Mercantil, y durante la primera década del siglo su fortuna creció hasta límites inimaginables. Adquirió otras minas de los alrededores, como Catavi-Siglo XX, Uncía y Huanuni, con lo que consolidó el complejo minero más importante del país.

En la década de 1920 la expansión de su poderío económico era imparable: consolidó su fortuna y emprendió la modernización de sus minas, cuyo número e importancia no dejaban de aumentar.

En 1924 compró a sus socios chilenos el total de las acciones de Compañía Minera de Llallagua, lo que le convirtió en el único propietario de dicho centro minero. De inmediato procedió a fusionar en Estados Unidos sus propiedades de Uncía y Llallagua, y creó The Patiño Mines and Enterprises Consolidated Incorporated (PMECI).

Su residencia

En 1925 fijó su residencia, alternativamente, en París y Nueva York, y sus intereses económicos se transnacionalizaron, fijando la sede legal de su empresa en Estados Unidos. Fue uno de los socios fundadores de El Diario de la ciudad de La Paz, periódico cuya publicación continua vigente. En [[1930] proporcionó al gobierno boliviano un empréstito patriótico de para financiar los gastos que le suponía su conflicto con Paraguay sobre los territorios del Chaco. Adquirió propiedades, empresas y yacimientos mineros en América del Norte, Europa, Asia, África y Oceanía.

Solidaridad

En 1912 se instala en Europa con su familia. En 1924, durante una visita a Bolivia, sufre un grave ataque al corazón tras el cual le resultará imposible regresar a Bolivia debido a la gran altitud del país. Sin embargo, apoyo a Bolivia durante la guerra del Chaco y fue un industrial que creo miles de empleos para sus compatriotas. En 1931, erigió la Fundación que lleva su nombre con el fin de formar técnicos bolivianos. En 1939 se marcha de Europa y se establece en Nueva York. Hacia el final de su vida se afinca en Argentina, para estar más cerca de su país. Patiño demostró ser uno de los empresarios bolivianos con mayor sentido solidario, apoyo a las causas democráticas durante las guerras mundiales. Alcanzó el éxito gracias a su gran capacidad de trabajo, perseverancia y sentido patriótico. Al finalizar la Segunda Guerra Mundial controlaba gran parte del mercado mundial del estaño, y su inmensa fortuna personal le colocó, en la década de 1940, en la lista de los hombres más ricos del mundo.

Creación de un banco

Patiño extiende rápidamente su campo de acción a otras minas y diversifica sus actividades. Crea un banco, comercializa él mismo su mineral, y abre fundiciones. Simultáneamente, realiza inversiones en yacimientos mineros en Malasia, Canadá, etc. A fines de los años 30, más del 60% de la producción mundial de estaño era tratada en sus fundiciones.

Muerte

Muere en Buenos Aires el 20 de abril de 1947, a los 86 años de edad.

Fuentes