Edoardo Bellarmino

Edoardo Bellarmino
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NombreEdoardo Bellarmino Perroncito
Nacimiento10 de marzo de 1847
Viale d'Asti Bandera de Italia Italia
NacionalidadItaliana
CiudadaníaItaliana
FamiliaresAldo (hijo)

Edoardo Bellarmino Perroncito. Profesor e investigador italiano.

Síntesis biográfica

Nació en Viale d'Asti el 10 de marzo de 1847. Luis, su padre, era zapatero y Lucía, su madre, se desempeñaba como costurera. Tuvo cuatro hermanos varones y una hermana.

Estudios

Al término de sus estudios secundarios, realizados en Asti, ganó un concurso con el que pudo inscribirse gratuitamente en la Regia Scuola Superiore de Medicina Veterinaria de la Universidad de Turín.

A los veinte años de edad, obtiene brillantemente su licenciatura, y comienza a desempeñarse como veterinario municipal en Turín. Poco tiempo después ingresa, en calidad de asistente, en el Instituto de Anatomía Patológica y Patología General, dirigido por el profesor Sebastiano Rivolta.

Trayectoria laboral

En 1873 gana por concurso el puesto de sucesor del mismo. Al año siguiente, a la temprana edad de 27 años, es nombrado profesor titular de la cátedra de Anatomía Patológica. Tal fue el esplendoroso comienzo de una larga carrera de docente e investigador en que, durante más de medio siglo, se desempeñó en la Scuola di Veterinaria de Turín. Fue en este ámbito, ciertamente estimulante, donde pudo comenzar sus investigaciones en el campo de la patología animal, que, al igual que las otras ramas de la ciencia, se encontraba en pleno desarrollo y evolución.

Fue presidente de la Academia de Medicina de Turín, de la Reale Società ed Accademia Veterinaria Italina y fue presidente honorario de la Société Zoologique de Francia. Además presidió numerosos congresos internaciones de medicina, veterinaria y apicultura.

Su multifacética personalidad se afirmó asimismo en otros campos de la vida civil y cultural de su época. Durante muchos años se desempeñó como alcalde de Viale d'Asti y llegó a ser el decano de los alcaldes de la provincia de Alessandria. También se le eligió consejal municipal de Turín, fue mazón, y en 1918 presidió el comité para la erección del monumento a Mazzini de Turín. También fue presidente del comité de la Sociedad Dante Alighieri de Turín.

Trayectoria científica

Se presentaba al patólogo veterinario la oportunidad de abordar con técnicas nuevas y más precisas el estudio de las manifestaciones morbosas y sus causas. La actividad de Perroncito se orientó por un lado hacia estudios de anatomía patológica, y por el otro, hacia investigaciones de índole microbiológica y parasitológica.

La celebridad alcanzada mundialmente por el veterinario de Asti se vinculó principalmente con los resultados obtenidos en el campo de la parasitología. Sus investigaciones, su prestigio y su entusiasmo lo llevaron asimismo a ocupar, en 1879, la cátedra de Parasitología -primera en Italia- de la Facultad de medicina y cirugía de Turín. Este hecho, marcó el surgimiento de la parasitología, como ciencia nacida de la colaboración entre la patología y la zoología.

En aquel mismo año 1879, se le solicitó que estudiara la enfermedad que aquejaba a numerosos obreros empleados en la construcción del ténuel del San Gottardo. Se trataba de una severa forma de anemia que ya había matado a miles de mineros y provocado la internación, en hospitales de Lombardía y Piamonte.

Durante la autopsia de un minero muerto de anemia, pudo observar en el duodeno la presencia de más 1500 diminutos gusanillos adheridos a la mucosa. Se trataba de una especie de nemátodos que nunca habían sido relacionados directamente con la enfermedad que afectaba típicamente a mineros y a otras personas que trabajaban generalmente en lugares húmedos.

Aquello fue todo un éxito: con tal tratamiento todos los nemátodos presentes en el duodeno, que ejercían una gravísima acción expoliatoria nutriéndose de la sangre extraída de los vasos de las paredes intestinales, eran expulsados, y en poco tiempo los pacientes recobraban un excelente estado de salud.

Desde entonces, millares de enfermos, no sólo en Italia sino también en otras zonas mineras de Europa, como Francia, Bélgica, Alemania y Hungría, sanaron, y en pocos meses la enfermedad de los mineros se convirtió en una cuestión resuelta. La mejor confirmación del hecho fue, pocos años después, la total ausencia de la patología en las obras de construcción del túnel.

Si esta fue indudablemente la etapa más importante en su carrera científica, hubo otras no menos relevantes, en las que se desempeñó en los campos de la microbiología, la higiene y la profilaxis.

La larga como intensa carrera del docente universitario concluyó cuando, en noviembre de 1923, se retiró por razones de edad. La merecida celebración del evento fue organizada por un comité al que adhirieron autoridades y científicos italianos y extranjeros. Participaron intensamente en ella alumnos y colegas, y el científico recibió innumerables demostraciones de estima provenientes de todo el mundo. En tal ocasión, el profesor Voronoff, de París, pronunció una conferencia sobre sus entonces famosas investigaciones en materia de rejuvenecimiento por medio de transplante de testículos, experimentos realizados con un ser humano y órganos de monos donantes.

Muerte

Sus restos reposan en el cementerio de Pavía, junto a los de su hijo Aldo.

Premios

En 1882 recibió el premio Balbi-Vallier del Regio Istituto Veneto di Scienze e Lettere, y en 1931, como muestra de cuánta estima se le tenía todavía después de muchos años de retirarse de la vida académica, recibió el premio Montyon de la Academia de Ciencias de Francia, de la que era miembro correspondiente.

Francia le confirió asimismo la Legión de Honor y las Palmas Académicas. Recibió el título de Doctor Honoris Causa de la Universidad de Modena, de la Universidad Reina Victoria de Manchester y, en 1911, de la Universidad Imperial de Viena.

Fuentes

  • VV. Le onoranze al Prof. Perroncito in "Giornale di Medicina Veterinaria", anno LXXI, 1923, pp. 665-680.
  • BALBO T., In memoria di Edoardo Perroncito nel centenario di fondazione della prima cattedra di parassitologia, "Parassitologia", vol. XXII, 1980, pp. 233-237.
  • BARILE C., Le onoranze a Edoardo Perroncito, "La Clinica Veterinaria", anno 45°, pp. 735-739.
  • BARILE C., Edoardo Perroncito, "Il Nuovo Ercolani", anno XLI, 1936, pp. 522-526.
  • Medicina Veterinaria di Torino", vol. XV, 1