Echinacea purpurea

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Echinacea purpurea
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Echinacea purpurea11.jpg
Nombre Científico:Echinacea purpurea (L.) Moench
Reino:Plantae
División:Magnoliophyta
Clase:Magnoliopsida
Orden:Asterales
Familia:Asteraceae
Subfamilia:Asteroideae
Tribu:Heliantheae
Subtribu:Zinniinae
Género:Echinacea
Especie:Echinacea purpurea

Echinacea purpurea. Esta planta es la especie más difundida del género Echinacea. La flores son de color púrpura a rojo intenso, de hasta 7 cm de longitud. Tiene una marcada importancia por sus propiedades medicinales. Entre otros usos sirve como estimulante del sistema inmunológico fortaleciéndolo contra las enfermedades infecciosas.

Taxonomía

Nombre científico

Autores

  • Moench, Conrad
  • Publicado en: Methodus Plantas Horti Botanici et Agri Marburgensis : a staminum situ describendi 591. 1794. (4 May 1794)[5]

Basónimo

Combinaciones del basónimo

  • Brauneria purpurea (L.) Britton
  • Helichroa purpurea (L.) Raf. ex B.D. Jacks.[8]

Sinonimia

  • Rudbeckia purpurea L.[9]
  • Brauneria purpurea (L.) Britton
  • Echinacea intermedia Lindl. ex Paxton
  • Echinacea purpurea var. arkansana Steyerm.
  • Echinacea purpurea f. liggettii Steyerm.
  • Echinacea purpurea var. serotina (Nutt.) L.H.Bailey
  • Echinacea serotina (Sweet) D.Don ex G.Don f.
  • Echinacea speciosa (Wender.) Paxton
  • Helichroa purpurea (L.) Raf.[10]
  • Rudbeckia purpurea var. purpurea
  • Echinacea purpurea f. purpurea[11]

Historia

Desde hace muchos años Echinacea purpurea es bien reconocida por sus poderes curativos, utilizada por los antiguos habitantes de América del Norte para tratamientos de mordeduras de serpientes e innumerables dolencias.

En 1880, H.C.F. Meyer, un renombrado médico alemán, se estableció en la ciudad de Pawnee, Nebraska. Pronto entabló amistad con los nativos del lugar, lo cual le permitió conocer las distintas hierbas que utilizaban para sanar sus dolencias. En sus trabajos relata que fabricaban un remedio contra las mordeduras de serpientes, el cual contenía raíces de una especie en particular. Como desconocía su nombre, envió un ejemplar a los hermanos Lloyd, farmacéuticos establecidos en Cincinati, para que la identificaran.

John Lloyd (1849-1935), farmacéutico y fabricante, era un pionero en el uso de las plantas medicinales y su hermano Curtis Gates Lloyd (1859-1926), botánico y comerciante, identificó la misteriosa planta que Meyer había enviado como Echinacea angustifolia.

Más tarde, Meyer, convencido de las propiedades curativas de esta planta, le ofreció a los hermanos Lloyd ir a Cincinati y hacerse morder él mismo por una víbora cascabel para demostrar los poderes curativos de la Echinacea con el fin de iniciar la comercialización de esta hierba, pero ellos no aceptaron.

A pesar de la repercusión de la misma por sus propiedades medicinales entre los habitantes del lugar, Lloyd le escribió a John King, un médico ecléctico, solicitándole que investigara la droga adelantada por Meyer. En 1887, King comprobó la eficacia de dicha especie con sus propios pacientes y publicó un artículo en la Eclectic Medicinal Journal destacando su valor potencial.

De esta manera, Lloyd aceptó preparar medicamentos a base de Echinacea. Lloyds Brothers, se convirtió así en la primera compañía fabricante de preparados de uso farmacológico con echinacea. Estos productos fueron en un principio vendidos sólo a médicos y no al público en general, pero debido a la creciente demanda, en 1890 se vio obligado a exportar a Europa, ya que sus preparados eran muy requeridos por médicos del viejo mundo.

Hasta 1930 los productos de Echinacea eran preparados con Echinacea angustifolia y con Echinacea pallida. Esta última, se utilizaba como adulterante de la anterior, debido a la falta de suministro de aquella, pero ambas eran rotuladas como "Echinacea angustifolia". Mientras tanto, Gerhard Madaus, un fabricante alemán, viajó a Estados Unidos en busca de semillas, pero las semillas etiquetadas como Echinacea angustifolia y vendidas en Chicago, eran en realidad de Echinacea purpurea. Madaus creyó que tal vez podría existir un parecido entre ambas especies en lo relativo a sus usos medicinales y decidió, una vez multiplicada la especie, producir medicamentos en base a esta hierba. Como resultado de ello, las investigaciones iniciadas en Europa durante las décadas pasadas, se realizaron con Echinacea purpurea y no con E. angustifolia, la especie más usada por los nativos de América. Luego, se llegó a la conclusión de que ambas poseían virtudes semejantes.

Origen, hábitat y distribución

Es una planta originaria de Norteamérica, En su estado silvestre no es tan abundante como las otras especies, apareciendo ejemplares aislados en suelos húmedos y lugares abiertos.

Esta es la especie más difundida, encontrándose desde Maryland hasta Georgia, Oeste de Lousiana, extremo Norte de Texas, Este de Oklahoma, Norte de Ohio y Michigan.

Características

Echinacea purpurea se caracteriza por tener una altura variable de entre 0,8 y 1,0 m. Sus hojas son glabras, largamente pecioladas y dentadas; los capítulos florales son solitarios con flores de color púrpura a rojo intenso, de hasta 7 cm de longitud.

Parte utilizada

La droga está constituida por la raíz recolectada en otoño. En el comercio se la encuentra en trozos cilíndricos, de longitud y espesor variables, exteriormente pardo-grises hasta pardo-rojos, estriados a lo largo, algo retorcidos en espiral, irregularmente ramificados. La superficie de la fractura presenta fibras cortas.

Es inodora, de sabor débilmente aromático, al principio dulce y después acre, amargo. Posee resinas, azúcares, sales minerales, ácidos grasos e insulina. Todos sus componentes actúan en combinación otorgándole propiedades medicinales.

Propagación

Se reproduce en forma asexual a fines de invierno por división de matas, o por vía sexual sembrando sus semillas, las cuales necesitan antes de su implantación un período de estratificado de dos o tres meses.

Deben elegirse para ello terrenos con suelos sueltos, bien drenados y con buena luminosidad, ya que lugares sombríos son contraproducentes para el desarrollo normal de esta especie.

Cultivo

Desde 1995, la especie Echinacea purpurea se cultiva en parcelas demostrativas en la ciudad de Córdoba, con el fin de estudiar sus comportamientos iniciales en esa localidad. Debido a su importante demanda a nivel Internacional, se la cultiva comercialmente en Europa (especialmente en Alemania), Estados Unidos, Canadá, Australia, Nueva Zelandia y China.

Usos

Durante siglos fue un medicamento muy importante para los nativos americanos, quienes hacían uso de ella para tratamientos de fiebres comunes e infecciones menores, así como para fiebre tifoidea, meningitis, malaria, difteria, etc.

En una publicación de Materia Médica Americana (1983), Elimgwood destacó que esta especie destruye los gérmenes directamente de las infecciones y refuerza las defensas corporales por un aumento del contenido de glóbulos blancos, regulando además la temperatura corporal.

En trabajos más recientes, Bonadeos investigó los mecanismos por los cuales la Echinacea puede actuar previniendo las infecciones en el cuerpo humano. Una de las defensas primarias del cuerpo es el sistema hyaluronidasa (conocido como Sistema-H). El ácido Hialurónico (HA) es una sustancia que aparece en los tejidos intercelulares cementando las células entre sí. El autor sugiere que la Echinacea actuaría como barrera en contra de la infección. Se determinó además que hay una enzima que ataca el HA, haciéndole perder viscosidad. Si esto sucede, las bacterias patogénicas tales como estafilococos y estreptococos ingresan en el tejido y atacan las células del mismo.

El mismo autor sugiere que la Echinacea impide la acción de la enzima. Su acción radica en que actúa efectivamente clausurando una de las vías principales de la invasión bacteriana.

Más tarde, Buesing, explica un posible mecanismo de acción: la Echinacea y HA se combinarían entre sí para formar un complejo resistente a la acción enzimática, facilitando además la regeneración de las fibras del tejido conectivo.

Keller, en uno de sus trabajos, demuestra la actividad anti-inflamatoria de esta especie debido a la semejanza con la cortisona, lo que permite pensar en la posible acción anti-inflamatoria de esta especie.

El componente activo de la Echinacea es la echinacina, exhibiendo una actividad de protección celular contra virus relacionados con enfermedades tales como la gripe, el herpes y ulceraciones pequeñas, según los trabajos de Wacker y Wagner.

Estudios de especialistas alemanes han sostenido todo lo dicho hasta ahora y además sostienen otras propiedades inmuno estimulantes, especialmente en la actividad de T- celular, siendo esta célula un mediador importantísimo en el sistema inmunológico del cuerpo humano.

Referencias

Fuentes