Manuel Urrutia Lleó

Manuel Urrutia Lleó
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Manuel Urrutia

Presidente de la República de Cuba

Presidente de la República de Cuba
2 de enero de 1959 - 17 de julio de 1959
Primer ministroJosé Miró Cardona
PredecesorFulgencio Batista
SucesorOsvaldo Dorticós Torrado
Datos Personales
NombreManuel Urrutia Lleó
Nacimiento8 de diciembre de 1901
Yaguajay, Las Villas, Bandera de Cuba Cuba
Fallecimiento7 de julio de 1981
Nueva York, Bandera de los Estados Unidos de América Estados Unidos
Alma materUniversidad de La Habana
OcupaciónAbogado

Manuel Urrutia Lleó. Presidente de la República de Cuba de enero a julio de 1959. Abogado de profesión, alcanzó notoriedad cuando emitió un voto particular absolutorio en la Causa 67 que se seguía contra los revolucionarios alzados el 30 de noviembre y los expedicionarios del yate Granma. Por esa actitud fue propuesto por la dirección del Movimiento 26 de Julio para ocupar la presidencia provisional de la República.

La propuesta se concretó tras el triunfo de la Revolución el 1 de enero de 1959 y Urrutia juró como presidente en Santiago de Cuba en la madrugada del día 2. Su marcado anticomunismo y su oposición al rumbo radical de la Revolución Cubana le hizo entrar en contradicciones con el Primer Ministro, Fidel Castro y tras una gran presión popular renunció al cargo en julio de 1959.

Síntesis biográfica

Nació en Yaguajay, Las Villas el 8 de diciembre de 1901. Cursó estudios en la Facultad de Derecho de la Universidad de La Habana.

Tomó parte en la lucha contra la dictadura de Gerardo Machado Morales y se opuso desde 1934 a Fulgencio Batista y Zaldívar y a los gobiernos bajo su influencia. Después del golpe de Estado del 10 de marzo de 1952, también se enfrentó al dictador desde su puesto como magistrado en la Audiencia de Santiago de Cuba, cargo que ocupó entre los años 1949 y 1957.

El 14 de marzo de 1957, en su condición de presidente de la Sala Tercera de lo Penal, de la Audiencia de Oriente, emitió un voto particular absolutorio de los acusados en la Causa No. 67 de 1956, por haber tomado parte en el alzamiento del 30 de noviembre de 1956 y en la expedición del yate Granma. Disintiendo de sus colegas del tribunal, se apoyó en el Artículo 40 de la Constitución de 1940, para reconocer el derecho de los cubanos a la resistencia adecuada frente a la opresión de sus derechos.

Al asumir esta oposición hizo una valiente denuncia a la violación de los derechos individuales. En el juicio legitimó la oposición armada al gobierno de Batista, un régimen inconstitucional, instaurado por el golpe de Estado del 10 de marzo de 1952.

Por su actitud fue propuesto por la dirección del Movimiento 26 de Julio, en diciembre de 1957, para ser el futuro presidente de la República y enfrentar las maniobras de la recién creada Junta de Liberación, conocida también como Pacto de Miami, formada por representantes de los auténticos, ortodoxos, el Directorio Revolucionario y otras fuerzas opositoras, cuyos acuerdos fueron objetados por la Dirección Nacional del Movimiento 26 de Julio.

Urrutia aceptó la propuesta de la organización, se jubiló y salió al exilio, donde cumplió diversas tareas de apoyo a la revolución. Con posterioridad, en la reunión efectuada en Miami, el 11 de agosto de 1958, por el Frente Cívico Revolucionario, bloque unitario de todas las organizaciones opositoras que aceptaban la insurrección como forma de combatir la tiranía, y a propuesta del Movimiento 26 de Julio fue aprobada la candidatura del doctor Manuel Urrutia como presidente provisional.

Presidencia de la República

El 7 de diciembre de 1958 llegó a territorio rebelde, junto con su familia, a bordo de un avión en el cual se transportaban armas desde Venezuela. Tras el triunfo revolucionario se le ratificó como presidente provisional el 1 de enero de 1959 y en la madrugada del día 2, en el balcón del Ayuntamiento de Santiago de Cuba, juró como presidente provisional de la República de Cuba.

Manuel Urrutia firma su designación

Entre las primeras medidas adoptadas por su gobierno estuvo la designación de Fidel Castro como Comandante en Jefe de las Fuerzas de Tierra, Mar y Aire. Anunció la puesta en vigor de la Ley Fundamental del Estado cubano, basada, en esencia, en la Constitución de 1940, con las modificaciones que las nuevas circunstancias demandaban; declaró disuelto el Congreso y extinguidos los mandatos de gobernantes, alcaldes y concejales y nombró una comisión que se encargaría del estudio de todas las disposiciones dictadas por la tiranía que debían derogarse.

El gobierno revolucionario quedó instalado en el Palacio Presidencial en la noche del 5 de enero de 1959, el presidente de la república declaró cesantes en sus cargos a Fulgencio Batista y sus colaboradores gubernamentales, y designó por decreto a los integrantes del gabinete.

Con la creación del Ministerio de Bienestar Social el 23 de enero de 1959 y la designación para dirigirlo de la Doctora Elena Mederos Cabañas, Urrutia concluyó con la estructuración de su gabinete de gobierno que quedó integrado de la siguiente forma:

Gabinete de Manuel Urrutia Lleó[1]
Ministerio Ministro
Primer Ministro José Miró Cardona
Ministerio de Estado Roberto Agramonte Pichardo
Ministerio de Justicia Ángel Fernández Rodríguez
Ministerio de Recuperación de Bienes Malversados Faustino Pérez Hernández
Ministerio de Gobernación Luis Orlando Rodríguez Rodríguez
Ministerio de Obras Públicas Manuel Ray Rivero
Ministerio de Agricultura Humberto Sorí Marín
Ministerio de Comercio Raúl Cepero Bonilla
Minsiterio de Educación Armando Hart Dávalos
Ministerio de Trabajo Manuel Fernández García
Ministerio de Hacienda Rufo López Fresquet
Ministerio de Comunicaciones Enrique Oltuski Ozacki
Ministerio de Defensa Nacional Augusto Martínez Sánchez
Ministerio de Bienestar Social Elena Mederos Cabañas
Ministerio Encargado de la Ponencia y Estudio de las Leyes Revolucionarias Osvaldo Dorticós Torrado
Minsiterio Encargado del Consejo Nacional de Economía Regino Boti León
Ministerio Encargado de la Corporación Nacional de Transporte Julio Camacho Aguilera
Ministerio de la Presidencia Luis Buch Rodríguez

Tanto el Presidente como el Primer Ministro y, principalmente, los titulares de Obras Públicas, Agricultura y Trabajo, se habían opuesto a la dictadura de Fulgencio Batista, pero eran de pensamiento conservador. Los Ministros de Estado y Bienestar Social no estaban identificados con el carácter radical de la Revolución[2].

Urrutia decretó la disolución del Buró para la Represión de las Actividades Comunistas (BRAC), el Servicio de Inteligencia Militar, el Buró de Investigaciones y otros organizaciones represivas de la tiranía.

Fidel asume la responsabilidad de primer ministro, con Urrutia como presidente, el 16 de febrero de 1959.

Ante el descontento popular por la lentitud del Gobierno Provisional para adoptar las medidas que el país necesitaba con urgencia, el 13 de febrero el Consejo de Ministros renunció en pleno ante Urrutia[2]. El 16 de febrero de 1959 designó al Comandante Fidel Castro primer ministro del Gobierno Revolucionario, en sustitución del doctor José Miró Cardona que había renunciado. Fidel comenzó a presidir las reuniones del Consejo de Ministros y Urrutia, como máxima autoridad del Estado, sancionaba las disposiciones acordadas por esa instancia. En estas condiciones se aprobaron una serie de leyes que beneficiaban, en lo esencial, a las capas más humildes del país, como la Ley de Reforma Agraria; se eliminó la Renta Nacional de Lotería, y se creó el Instituto Nacional de Ahorro y Vivienda.

Pero en poco tiempo, la actuación de Urrutia se convirtió en un freno para el cumplimiento del programa revolucionario, pues retrasaba la firma de determinadas leyes acordadas en el Consejo de Ministros, algunas de las cuales eran de un alto valor político, creando una situación de desconfianza. La falta de tacto del presidente provocó no pocas situaciones negativas, las cuales fueron lesionando su prestigio y autoridad, pues en ocasiones desarrollaba una política radical y en otras mostraba posiciones conservadoras oportunistas.

La situación de Urrutia se hizo más conflictiva a partir de mayo de 1959, cuando su confusa actuación comenzó a ser utilizada por los enemigos de la profundización de la Revolución. El 16 de julio 1959, Fidel Castro renunció al cargo de primer ministro por la situación creada por el presidente Urrutia de obstaculizar la aprobación de leyes revolucionarias y otras medidas del gobierno e hizo pública esta acusación el 17 de ese mes, en un programa televisivo conocido como Ante la Prensa. En horas de la noche, tras una gran protesta popular de respaldo a Fidel Castro, Urrutia renunció al cargo en una reunión del Consejo de Ministros y casi de inmediato fue sustituido por Osvaldo Dorticós Torrado[2].

Exilio

En abril de 1961 se asiló en la embajada de Venezuela. Estuvo asilado en esa sede diplomática y en la de México, hasta que se le otorgó un salvoconducto para salir del país en 1963. Establecido en Estados Unidos, participó en actividades contrarias a la Revolución Cubana, hacia la cual mantuvo desde su salida del gobierno una postura hostil. En el exilio escribió libros y fue profesor de español en el barrio neoyorquino de Queens.

Falleció el 7 de julio de 1981, a los 79 años en la ciudad de Nueva York, en el Hospital Saint John.

Referencias

Fuentes