Cine de Estados Unidos

(Redirigido desde «Cine Estadounidense»)
Cine de Estados Unidos
Información sobre la plantilla
Jolivuhhfgr.jpg
Concepto:La industria cinematográfica estadounidense ha tenido un profundo efecto en el cine alrededor del mundo desde inicios del siglo XX. Su historia se divide en ocasiones en cuatro períodos principales: la era muda, el cine clásico de Hollywood, el nuevo Hollywood, y el período contemporáneo (a partir de 1980).

Cine Norteamericano. La industria cinematográfica estadounidense es considerada con un elevado nivel técnico, esto y la eficacia de su red comercial y de distribución harán que previsiblemente siga manteniendo en un futuro su posición dominante en el mercado mundial.

El primer gran éxito del cine estadounidense, así como el logro experimental más largo hasta el momento, fue El gran atraco al tren, dirigida por Edwin S. Porter. En los albores de la industria cinematográfica estadounidense, Nueva York fue el epicentro de los cineastas.

Historia

Inicios

Filme "El ciudadano Kane"

La primera proyección pública de una película en Estados Unidos tuvo lugar en 1896 en Nueva York. El proyector había sido desarrollado por el inventor Thomas Alva Edison, cuya empresa era también la productora de los cortometrajes. La paternidad del cine de ficción estadounidense suele atribuirse a Edwin S. Porter, quien en 1903 utilizó una innovadora técnica de montaje en la película de "8 minutos Asalto y robo de un tren" por la cual diferentes fragmentos procedentes de distintas tomas de un mismo filme se unen para formar un todo narrativo. Esta obra convirtió el cine en una forma artística muy popular, y dio lugar a que en todo el país aparecieran pequeñas salas de proyección, los llamados nickelodeones.

David Wark Griffith, discípulo de Porter, desarrolló los principios de éste utilizando tomas panorámicas y primeros planos, así como montajes paralelos, como medios de expresión para mantener la tensión dramática, con lo que se convirtió en el pionero más importante del cine mudo en Estados Unidos. Con sus obras El nacimiento de una nación (1915) e Intolerancia (1916) inició la tradición de cine histórico en su país.

La segunda instancia grabada de imágenes capturando y reproduciendo movimiento fue una serie de fotografías de Eadweard Muybridge que mostraban un caballo galopando, tomadas en Palo Alto, California, utilizando un conjunto de cámaras fijas colocadas en fila. El logro de Muybridge motivó a inventores de todas partes para intentar creas dispositivos similares que pudiesen capturar ese movimiento. En EE. UU., Thomas Alva Edison fue el primero en producir un dispositivo de esas características, el kinetoscopio, cuya abusiva patente forzó a los primeros cineastas a buscar otras alternativas.

En EE. UU., las primeras exhibiciones de películas para grandes audiencias se hacían usualmente en los descansos de los shows de vodevil. Los empresarios comenzaron a viajar para exhibir sus películas, llevando al mundo las primeras incursiones en el género del drama. El primer gran éxito del cine estadounidense, así como el logro experimental más largo hasta el momento, fue El gran atraco al tren, dirigida por Edwin S. Porter.

En los albores de la industria cinematográfica estadounidense, Nueva York fue el epicentro de los cineastas. El estudio de grabación de Kaufman-Astoria en Queens, construido durante la etapa muda del cine, fue usado por los hermanos Marx y W. C. Fields. Chelsea (Manhattan) también era utilizado con frecuencia. Mary Pickford, una actriz ganadora del premio de la Academia, rodó algunas de sus primeras películas en esta zona. Sin embargo, el mejor clima de Hollywood durante todo el año lo convirtió en una mejor opción para rodar.

El cine sonoro

Grandes actores del cine norteamericano

Con la introducción del cine sonoro a finales de la década de 1920 surgieron nuevos géneros cinematográficos: las pantallas pasaron a estar dominadas por los musicales (con numerosas películas de bailes, sobre todo de Busby Berkeley) y filmes de gángsters, que trataban dos temas de actualidad: la Gran Depresión y la Ley Seca (por ejemplo, Hampa dorada, de Mervyn Le Roy, en 1930, o Scarface, el terror del hampa, de Howard Hawks, en 1932). El género clásico de los principios del sonoro pasó a ser un tipo de comedia conocida como screwball, caracterizada por un ritmo de acción rápido y un humor irreverente (Capra, Hawks). Lubitsch fue el maestro de este género, que posteriormente sería parodiado sobre todo por los hermanos Marx.

Surgieron numerosas películas de crítica social, entre cuyos temas figuraba la guerra (Sin novedad en el frente, de Lewis Milestone, en 1930). Sin embargo, también se desarrollaron otros géneros más ligeros. Así, el cine de terror alcanzó su apogeo a principios de la década de 1930 (El doctor Frankenstein, de James Whale, en 1931; Drácula, de Tod Browning, en 1931; King Kong, de Ernest B. Schoedsack, en 1933), y las películas del Oeste volvieron a florecer.

El período estuvo caracterizado por el culto a las estrellas centrado en torno a actores como Marlene Dietrich, Mae West, Jean Harlow, Katherine Hepburn, Bette Davis, Humphrey Bogart o Clark Gable. A finales de los años treinta, Shirley Temple alcanzó la cumbre de su popularidad como estrella infantil. A finales de la década se impuso el color en el cine, cuyas posibilidades aprovechó sobre todo Walt Disney en sus películas de animación centradas en torno a las figuras de Mickey Mouse y el Pato Donald.

Hollywood

A principios de 1910, el director D.W. Griffith fue enviado por el Biograph Company para la costa oeste con su compañía. Empezaron a filmar en un terreno baldío cerca de Georgia Street, en el centro de Los Ángeles. La compañía exploró nuevos territorios y viajó varias millas al norte de un pequeño pueblo. Este lugar fue llamado "Hollywood". Griffith entonces filmó la primera película en Hollywood, California, un melodrama sobre California en el 1800, mientras pertenecía a México. Después de escuchar acerca de este maravilloso lugar, en 1913, muchos encargados del cine se dirigieron al oeste para evitar las tasas impuestas por Thomas Edison, propiedad de las patentes sobre el cinematografo.

Antes de la Primera Guerra Mundial, las películas se hicieron en varias ciudades de EE.UU., pero los cineastas gravitado el sur de California como la industria a desarrollarse. Fueron atraídos por el clima suave y fiable de la luz solar, lo que permitió a las películas de cine al aire libre durante todo el año, y por la variedad de sus paisajes que estaba disponible.

Los mejores años

Casablanca, filme clásicoo

Durante la llamada época de oro en los estudios de Hollywood no había dos películas exactamente iguales, pero la mayoría seguían un género: Western, comedia, cine negro, musicales, cine de animación, biográfico, etc, y los mismos equipos creativos solían trabajar en las películas producidas por el mismo estudio - por ejemplo, Cedric Gibbons y Herbert Stothart siempre trabajaron en las películas de la MGM, Alfred Newman trabajó para la Twentieth Century Fox durante veinte años, casi todas las películas de Cecil B. De Mille fueron producidas por la Paramount, las películas del director Henry King fueron en su mayoría rodadas para Twentieth-Century Fox, etc.

Se podía llegar a adivinar qué estudio había producido cada película solo por los actores que aparecían en ella; cada estudio tenía su propio estilo y toque característico que hacía posible averiguarlo - una cualidad que no existe hoy día. Aun así cada película tenía ligeras diferencias, y, en contraposición a los fabricantes de coches, la mayoría de las personas que intervenían en el rodaje eran artistas.

Por ejemplo, Tener y no tener (1944) es famosa no solo por su pareja de protagonistas Humphrey Bogart (1899-1957) y Lauren Bacall (1924) sino también por haber sido escrita por dos futuros ganadores del Premio Nobel de Literatura: Ernest Hemingway (1899-1961), autor de la novela en la que se basó la película, y William Faulkner (1897-[1962]]), que trabajó en la adaptación para la pantalla grande.

Muchos historiadores hacen hincapié en la gran cantidad de buenas películas que surgieron en este período de férreo control de los rodajes. Una de las razones que hizo esto posible fue que, con tantas películas en producción simultáneamente, no todas tenían que ser un éxito de taquilla. Un estudio podía arriesgarse con un proyecto de presupuesto medio que tuviese un buen guión y actores relativamente desconocidos: Ciudadano Kane, dirigida por Orson Welles (1915-1985), cumplía estas premisas.

En otros casos, directores con una gran personalidad como Howard Hawks (1896-1977) y Frank Capra (1897-1991) se pelearon con los estudios para imponer sus visiones artísticas. El sistema de estudio alcanzó, probablemente, su apogeo en el año 1939, que vio el estreno de clásicos como El mago de Oz, Lo que el viento se llevó, La diligencia, Caballero sin espada, Solo los ángeles tienen alas, Ninotchka, y Medianoche. Entre otros títulos salidos de la Edad de Oro que son considerados clásicos podemos citar: Casablanca, ¡Qué bello es vivir!, la versión original de King Kong, y Blancanieves y los siete enanitos.

El nacimiento de una nación

El punto de partida para el cine americano fue Griffith con El nacimiento de una nación que fue pionera en la filmación de vocabulario que todavía domina el celuloide hasta el día de hoy.

El nacimiento de una nación es uno de los grandes hitos de la historia del cine, y lo es porque David W. Griffith reúne y sistematiza todos los recursos narrativos que había ido desarrollando el cine hasta ese momento (1915). Lo hace de una forma en que queda establecido un modelo de cine que se perpetuaría hasta la actualidad.

La forma en que se establece el salto de eje, el uso de los primeros planos, la alternancia entre planos generales que permiten que el espectador comprenda y organice mentalmente el espacio donde transcurre la acción y planos cortos donde se aprecia el detalle constituyen la base del modelo.

El desplome del período de oro. La televisión

El sistema de estudio de Hollywood sucumbieron a dos fuerzas a finales de los años 40: la intervención federal que separó la producción de películas de su exhibición en salas; y la invención de la televisión.

Como resultado de esa intervención, actores y cuerpo técnico fueron liberándose gradualmente de sus contratos con las productoras. Ahora, cada película hecha por un estudio podría tener un reparto y equipo creativo completamente distinto, desencadenando en la pérdida gradual de todas esas "características" que hicieron inconfundibles a las películas de la MGM, Paramount, Universal, Columbia, RKO y Twentieth-Century Fox.

El número de películas en rodaje descendió bruscamente, incluso las de gran presupuesto, marcando un cambio en la estrategia a seguir por la industria. Los estudios se centraron en producir entretenimiento que no pudiese ser ofrecido por la televisión: espectáculo, producciones con argumentos trascendentales, mientras otros cedieron los derechos de sus bibliotecas cinematográficas y teatrales a otras compañías para ser vendidos a la televisión. Aunque la televisión acabó con la hegemonía de la industria cinematográfica en el entretenimiento estadounidense, el surgimiento de la televisión resultaría ventajoso, a su forma, para las películas.

Esto fue debido a que la opinión pública sobre la calidad de la programación televisiva decayó rápidamente y, por el contrario, el estatus del cine empezó a ser cada vez más reconocido como una forma de arte seria y digna de respeto y estudio. Esto fue complementado con la milagrosa decisión en la que la Corte Suprema de los Estados Unidos revocó su decisión y dictaminó que las películas eran una forma de arte con derecho a la protección de la Primera Enmienda.

Renacimiento de Hollywood

Nuevo Hollywood es un término utilizado para describir la aparición de una nueva generación de directores educados en escuelas de cine y que han absorbido las técnicas creadas en Europa en la década de los 60. Directores como Francis Ford Coppola, George Lucas, Brian de Palma, Martin Scorsese, y Steven Spielberg llegaron para crear productos que rindiesen homenaje a la historia del cine e innovar sobre los géneros y técnicas ya existentes.

Al principio de la década de los 70, sus películas fueron a la vez alabadas por la crítica y exitosas comercialmente. Mientras las primeras películas del «nuevo Hollywood» como Bonnie y Clyde y Easy Rider habían sido relativos affairs de bajo presupuesto con héroes amorales y una sexualidad y violencia incrementadas, el enorme éxito cosechado por Coppola, Spielberg y Lucas con El padrino, Tiburón, y La guerra de las Galaxias, respectivamente ayudaron a establecer el concepto moderno de "cine comercial" o mainstream, y llevaron a los estudios a enfocar más seriamente sus esfuerzos en intentar producir grandes éxitos.

El cine independiente

El cine independiente estadounidense fue revitalizado a finales de los años 1980 y principios de los años 1990 cuando otra nueva generación de cineastas, incluyendo a Spike Lee, Steven Soderbergh, Kevin Smith, y Quentin Tarantino rodaron títulos como, respectivamente, Haz lo que debas, Sexo, mentiras y cintas de vídeo, Clerks., y Reservoir Dogs.

En términos de dirección, guión, edición y otros elementos, estas películas fueron innovadoras y a menudo irreverentes, jugando con la contradicción de las convenciones de las películas de Hollywood. Además, su considerable éxito económico y su cruce con la cultura popular restableció la viabilidad comercial del cine independiente. Desde entonces, la industria del cine independiente se ha definido con más claridad y con más influencia en el cine estadounidense. Muchos de los principales estudios se han enfocado en ello mediante la creación de subsidiarios para producir películas similares; por ejemplo Fox Searchlight Pictures.

Figuras Notables en el cine norteamericano

Directores

Actores

Enlaces Externos

Fuentes