Pedro Álvarez de Villamarín

Pedro Álvarez de Villarín
Información sobre la plantilla
Bandera de Cruz de Borgoña.png
Gobernador de Cuba
1708 - 1711
PredecesorNicolás Chirino (Civil)
Luis Chacón (Militar)
SucesorPablo Cavero (Civil)
Luis Chacón (Militar)
Bandera de Cruz de Borgoña.png
Gobernador de Cuba
1712 - 1716
PredecesorPedro Agustín y Hourritinier (Civil)
Luis Chacón (Militar)
SucesorVicente de Raja
Datos Personales
NombrePedro Álvarez de Villarín
Nacimiento1655
Pontevedra, Bandera de España España
Fallecimiento9 de julio de 1706
La Habana,Bandera de Cuba Cuba
Ocupaciónmilitar

Pedro Álvarez de Villamarín. Militar y mariscal que luchó en numerosas batallas al servicio de la Corte Española y por sus méritos y cualidades militares fue nombrado Capitán General de Cuba.

Síntesis biográfica

Nació en Pontevedra, España. Se ignora quiénes fueron sus padres, se dice que fueron vecinos del, lugar del conde de Lemos, donde nació Pedro, con educación de cuna hidalga. Su segundo apellido era un gentilicio cuya transformación se aprecia a los largo de su carrera (Villariño, Villarino, Villarín), como también su deformación en algunas citas históricas Villamarín. Entre las diferentes formas, algunas de las cuales suprimen también el primer apellido, preferimos la que consta en su relación de servicios impresa.

Trayectoria militar

Por una deposición de su primer capitán, Gregorio de Pruzos, se sabe que Pedro Álvarez de Villamarín fue estudiante en la Universidad de Compostela, probable razón de que le nombrara alférez de la compañía que había de levar para el Tercio del Conde de Amarante, formado con naturales del Reino de Galicia. Careciendo de experiencia militar, no podía comenzar a servir de alférez salvo “suplemento de servicios”, autorización que expedían los capitanes generales en nombre del Rey. Pedro sentó plaza en él, con el grado de alférez y 15 escudos de sueldo, en la compañía referida el 16 de abril de 1674, pasó su primera muestra en La Coruña, antes de embarcar hacia Flandes, aportando en Ostende el 29 de mismo mes.

La compañía de Pruzos fue proveída en Francisco Reinaldo y Navarro el 21 de enero de 1676, que usó su facultad para nombrar sus propios oficiales, quedando Pedro reformado sentando plaza de soldado en la compañía del mariscal de campo del mismo tercio en la que permaneció hasta el 24 de julio de 1678, en que se le nombró ingeniero y pasó a servir de supernumerario de sargento general de batalla. Se conocen las circunstancias que propiciaron dicho nombramiento por certificaciones de distintos oficiales, ya que tuvo su origen en uno de los hechos de armas más notables de su carrera.

En una de sus tantas batallas los franceses atacaron la posición al este de Vilvorde pasando por Bruselas e hiriendo al sargento mayor Martín de Cevallos quien comandaba la tropa, por lo que Pedro quedó a cargo de la defensa con sólo dieciséis supervivientes. Durante este día el 16 de septiembre de 1677, fortificó tan bien el lugar que “lo puso a prueba de cañón” y logró rechazar un nuevo asalto del enemigo hasta que fue socorrido, abortando así el intento francés de cortar la comunicación y el suministro de agua a Bruselas.

Un ingeniero, que asistió después a mejorar los trabajos, quedó tan complacido con las defensas que había levantado que le recomendó para el empleo, obteniendo plaza de ingeniero supernumerario tras pasar un examen en Bruselas.

Ascendió a capitán de infantería por patente de 24 de noviembre de 1680, aunque siguió sirviendo de supernumerario hasta 1689, en que fue nombrado ayudante general del marqués de Gastañaga, siéndolo después del conde Bruay en 1691, del conde de Thiennes en 1692 y de nuevo del marqués de Gastañaga en 1693, todos ellos sargentos generales de batalla, hasta que en 1694 pasó a serlo del marqués de Vaudemont, gobernador de las armas del Ejército de Flandes. Sirvió en todas las campañas de la Guerra de la Liga Augsburgo durante el período 1689-1697, señalándose en el socorro de Mons y retirada de la guarnición de Halle en 1691, como también en la batalla de Steinkerque el 3 de agosto de 1692.

Fue promovido al empleo de mariscal de campo en febrero de 1698, con 116 escudos de sueldo, pasando a servir a Italia, cerca de la persona del capitán general Claudio Enrique de Lorena, príncipe de Vaudemont, su antiguo jefe en Flandes, que el 17 de mayo de 1698 tomó posesión del gobierno de Lombardía.

Asistió además en campaña junto al mariscal de campo, general del Ejército, el bailío Francisco Fernández de Córdoba Aguilar y Pimentel, participando en los combates de Carpi el 9 de julio de 1701 y Chiari el 1 de septiembre, que no consiguieron desalojar a los austríacos de sus sólidas posiciones en el alto Bórmida. A la conclusión de aquella campaña, el príncipe de Vaudemont le concedió una licencia temporal de seis meses para ir a España el 23 de noviembre.

Hallándose en Galicia, hubo de presentarse en la Corte, y el 20 de julio debía regresar a Galicia, junto con el también mariscal de campo Alonso de Pinilla, para asistir al capitán general de aquel reino, príncipe de Barbençon, en las funciones que fuesen necesarias. Se incorporó el 7 de agosto, antes de que arribara la escuadra francesa del almirante Chateaurenaud, dando escolta a los galeones de la plata. Barbençon le encargó el gobierno de Vigo, presidiando el castrillo del Castro y el fuerte de San Sebastiá.

Fue recompensado por el Rey con su ascenso al grado de sargento general de batalla el 21 de mayo de 1703, siendo enseguida designado Capitán General de Cuba el 18 de junio de 1703. No obstante, permaneció en Galicia hasta el 18 de octubre, en que partió a la Corte para jurar su nuevo cargo. A partir de este momento, desaparece el rastro documental del personaje. Ni siquiera se conserva el expediente de su pasaje a Indias, con la preceptiva licencia de embarque para el equipaje y criados. No obstante, se sabe que llegó a La Habana en mayo de 1706 y, sin tomar la posesión del interino Chirinos, partió hacia Veracruz. Regresó el 2 de julio, cuando ya estaba en La Habana Pierre Le Moyne d’Iberville famoso corsario canadiense al que se venera como héroe nacional en su país. Parece que ambos compartían instrucciones secretas sobre una operación conjunta, se dice que contra las colonias británicas de Norteamérica.

Muerte

A su llegada a La Habana junto al mencionado pirata no se vieron ni un solo día hasta el 8 de julio, en que enfermaron súbitamente y murieron el día siguiente, uno en su residencia de la Real Fuerza y el otro a bordo de su buque insignia, surto en el puerto. Se sospechó de un envenenamiento, pero nada que fuera probado.

Fuente

  • Pedro Álvarez de Villarín [1]. Consultado: 11 de diciembre de 2018
  • Cuba durante la guerra de sucesión española: algunos aspectos militares [2]. Consultado: 11 de diciembre de 2018