DANA (Fenómeno meteorológico)

DANA
(Fenómeno meteorológico)
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Mapa España con la DANA.jpg

DANA El término DANA se refiere a Depresión Aislada en Niveles Altos.

Es utilizado por los meteorólogos españoles para hacer referencia a cualquier situación de lluvia intensa y abundante, sobre todo cuando ocurre en la costa mediterránea de la Península Ibérica durante el otoño.

Aunque es un evento meteorológico frecuente, la mayoría no tiene consecuencias nefastas; sin embargo, han existido algunas de triste recordación, como la de 1973 que afectó a la Comunidad de Andalucía y la Región de Murcia y la ocurrida en 2024, que azotó la Comunidad Valenciana, entre otras. En ambos casos, con grandes pérdidas humanas y materiales.

Definición de DANA

Es un fenómeno meteorológico anual que suele coincidir con el inicio del otoño y la primavera en el Mediterráneo occidental. Se experimenta particularmente en España y más concretamente a lo largo de la costa este y las islas Baleares, aunque sus efectos pueden sentirse también en zonas interiores.

A grandes rasgos, es el resultado de un frente de aire polar frío (corriente en chorro) que avanza lentamente sobre Europa occidental a gran altura (normalmente 5-9 km) y que, al chocar con el aire más cálido y húmedo del Mar Mediterráneo, genera fuertes y dañinas tormentas.

Históricamente, se conocía como “gota fría”, pues el núcleo consiste en aire muy frío y provoca tormentas y lluvias muy frías. El origen de este término surgió en Alemania en 1886, pero con el paso de los años y el avance en las formas de observación, incluyendo las satelitales, el término quedó en desuso y solo se continuó utilizando en su país de origen, Alemania y en España, donde fue popularizado por los medios de comunicación.

Entonces, hace unas décadas los meteorólogos españoles comenzaron a utilizar el término DANA (Depresión Aislada en Niveles Altos), para diferenciarlo del de “gota fría”, más general. DANA define mejor las características del fenómeno, pues se añadió el concepto de "en niveles altos" con tal de eliminar la ambigüedad que se podía introducir al poderlas confundir con otras, que sólo se encuentran en niveles bajos (bajas térmicas).[1][2]

Efectos

Uno de los efectos más notables son las intensas lluvias, que pueden provocar inundaciones en los lugares donde se producen. Igualmente, los vientos fuertes y la formación de tornados.

También, estos fenómenos vienen acompañados de la disminución de la temperatura.

Aunque es un evento frecuente, la mayoría de ellos no crean condiciones climáticas extremas, pero su potencial destructivo aparece justamente cuando se mezclan con las cálidas temperaturas terrestres y marítimas. Es entonces que los efectos señalados, sobre todo las intensas lluvias y fuertes vientos, pueden provocar consecuencias desastrosas en las regiones afectadas.

El viento puede llegar a más de 140 km/h en la costa causando caídas de árboles, pero en el interior amaina rápidamente de manera considerable. La marejada resultante puede destruir playas, embarcaciones y paseos marítimos, llegando a penetrar el mar en tierra firme y llegando a destruir los locales en primera línea. Aunque no llegan a ser tan poderosas como las de los huracanes, estas marejadas pueden elevar el nivel del mar 1 metro o más, tragándose playas y paseos. Los oleajes suelen superar los 4 o 5 m de altura, con olas que, sin ser muy altas, tienen una gran potencia por su corta longitud de onda.

Por otro lado, a diferencia de un temporal común, que se desplaza hacia el este, una DANA puede permanecer varada en el mismo lugar varios días o incluso moverse hacia el oeste, lo cual provoca que se puedan mantener sus efectos destructivos sobre la zona o región en la que se encuentra.

Con relación a los territorios donde se sienten sus efectos, son más frecuentes en las áreas costeras al existir una mayor humedad y gradiente térmico vertical. Al igual que los huracanes, la DANA depende del mar para obtener su energía, por lo que los mayores vientos y las mayores lluvias suelen ser en la costa, también al igual que los huracanes. No obstante, pueden dejarse notar sus efectos sobre superficies continentales si presentan valores de humedad relativa y gradiente térmico vertical destacables. Y de todas las zonas costeras, el litoral mediterráneo de la Península Ibérica es el que reporta la mayor cantidad de fenómenos meteorológicos complejos de este tipo en el occidente de Europa.

También, se han reportado fenómenos de similares características en zonas costeras de América del Sur de Argentina, Uruguay y Chile.

Respecto la época del año, la DANA o "gota fría" puede desarrollarse en cualquier época del año, sin embargo, los efectos de las mismas son más notorios a finales del verano y principios del otoño al encontrarse las condiciones más propensas, pues la temperatura del agua todavía es elevada, lo cual calienta el aire que está en contacto con dicha masa de agua y se eleva cuando existan mecanismos de disparo. La creencia popular es de la opinión de que sólo acontecen en esta época, ya que es cuando se notan más sus efectos. Sin embargo, estos fenómenos pueden suceder en cualquier mes, aunque en muchas ocasiones, no vienen aparejados a fenómenos meteorológicos adversos.

Relación con el cambio climático

De acuerdo con la evaluación de los expertos, la cada vez más frecuente ocurrencia de las DANAs y la intensificación de las lluvias asociadas a ellas, están estrechamente ligadas al cambio climático. El progresivo aumento de la temperatura del Mar Mediterráneo facilita que se den las condiciones para que haya más energía y humedad necesarias para que se dé una DANA más potente.

En 2023, un estudio de la Sociedad Meteorológica Estadounidense detectó un incremento de las DANAs desde la década de 1960 a escala global.

Por otro lado, a raíz del desastre natural provocado por la DANA de 2024 en la Comunidad Valenciana, el meteorólogo de la BBC, Matt Taylor, declaró:

"Estamos viendo más fenómenos de este tipo a medida que nuestro clima se calienta…Aunque tales eventos han sucedido en el pasado, se están volviendo más habituales.”[3]

Desastres naturales asociados a la DANA

En España:

  • Almería, el 11 de septiembre de 1891 una repentina gota fría asoló casi la totalidad de esta provincia, desbordando ríos y ramblas (cauces por donde transitan ríos en determinadas épocas). En total, se estima que hubo más de cien fallecidos en toda la provincia, entre ellos cuatro niños, aunque algunas fuentes elevan las cifras por la dificultad de contabilizar las víctimas en las áreas rurales en aquella época. Las autoridades locales no contaban con sistemas de alerta efectivos ni con infraestructuras adecuadas para gestionar un evento de tal magnitud. Este desastre demostró la necesidad de invertir en obras hidráulicas y de protección civil en una región proclive a las DANA. A partir de esta tragedia, se intensificaron las iniciativas para mejorar la gestión de riesgos de inundación en Almería y en otras zonas del sureste peninsular. En recordación a dichas víctimas, se construyó la primera estatua que tuvo la ciudad de Almería, la Estatua de la Caridad, donde se representó a una madre (Caridad), que sostiene a un niño en brazos y otro aparece agarrado a su falda, el cual lleva en su mano un pergamino con el texto “año 1891”.
    Valencia en 1957
  • Valencia, el 14 de octubre de 1957 La ciudad vivió una de las inundaciones más devastadoras de su historia. Una intensa “gota fría” causó el desbordamiento del río Turia. En menos de 24 horas, la ciudad quedó completamente anegada y, en los barrios más cercanos al río, el nivel del agua llegó a alcanzar los cinco metros. Este desastre provocó la muerte de, al menos, 81 personas y causó la destrucción de viviendas e infraestructuras. Las causas del desbordamiento se debieron tanto a las características de la cuenca del río Turia como de una infraestructura de drenaje insuficiente. Esta riada puso en evidencia la vulnerabilidad de la ciudad ante eventos extremos. Permitió abrir un debate serio sobre la necesidad de proteger las ciudades mediterráneas de los riesgos hidrográficos. La magnitud de la catástrofe en Valencia desencadenó medidas importantes para prevenir futuras inundaciones de esta naturaleza. Como respuesta, se desarrolló el Plan Sur, un proyecto de ingeniería civil que desvió el cauce del río Turia hacia el sur de la ciudad. Esta intervención no solo buscaba reducir el riesgo de futuras riadas, sino también transformar un problema de vulnerabilidad en una oportunidad para el desarrollo urbano y social. De este modo, Valencia consiguió integrar la seguridad hídrica en el crecimiento de la ciudad.
  • Murcia, el 19 de octubre de 1973. Se produjo el desbordamiento del Río Guadalentín, que es conocido como el “río más salvaje de Europa”, porque puede pasar de una sequedad extrema a la mayor de las crecidas en apenas cuestión de horas. Se consideró la peor crecida del río en el Siglo XX y las lluvias fueron de 300 mm. Y a nivel de España, se definió como uno de los peores eventos de este tipo. Hubo lugares donde el nivel del agua llegó a 15 m y la importante carga de materiales sólidos arrastrados aumentó la capacidad destructiva de las aguas a su paso por diferentes lugares. En aquellos años no se hablaba todavía de DANA ni de “gota fría”, pero ocasionaron más de 150 muertos y medio centenar de desaparecidos cuyos cuerpos, sepultados por el fango o arrastrados al mar, nunca fueron encontrados. Afectó regiones de Murcia, Almería y Granada.
  • Baleares, el 6 de septiembre de 1989. En menos de 2 horas, cayeron 188 litros por metro cuadrado sobre la ciudad de Manacor y 192 en Porto Cristo (a 12 km de dicha ciudad) con consecuencias devastadoras y un total de 5 muertos, lo que produjo un cambio en el litoral de la costa este de la isla de Mallorca.
  • Alicante. Paradójicamente, esta ciudad tiene un clima definido como semiárido y las precipitaciones anuales son escasas, con un escaso promedio de solo 37 días de lluvia al año. Sin embargo, en los meses de septiembre y octubre se han producido lluvias intensas que han provocado grandes inundaciones. La mayor de la historia se produjo el 30 de septiembre de 1997, con 270,3 mm, debido a una DANA. La ciudad se inundó y cinco personas fallecieron. Se destacan también las ocurridas en octubre de 1982 y en marzo de 2017, cuando se registraron precipitaciones de 233 mm y 137 mm respectivamente, que igualmente conllevaron importantes inundaciones.
  • Comarca de La Ribera (provincia de Valencia). 19 y 20 de octubre de 1982.
    La Pantanada de Tous - Octubre 1982
    Se conoce como la Pantanada de Tous, la mayor inundación ocurrida en España. Fue provocada por una DANA que permaneció estática durante horas sobre la región. Desde el día 19 comenzaron las lluvias torrenciales, que llegaron a registrar hasta 600 mm en un área de 700 km2. Una gran represa existente en el lugar (la presa de Tous), se fue llenando hasta alcanzar el tope de su capacidad y no se pudo abrir las compuertas, pues las fuertes lluvias habían desconectado el servicio eléctrico y, además, tampoco se pudo encender el grupo electrógeno de emergencia por estar inundada la sala donde se encontraba. Todo lo anterior provocó que el muro de la presa se derrumbara ante el peso del volumen de agua que contenía y todo ese caudal se derramó aguas abajo, provocando una gran inundación en una amplia zona, incluyendo grandes núcleos poblacionales, como la Comarca de Ribera Alta, la segunda área urbana más poblada de la provincia de Valencia. La ciudad de Alcira estuvo inundada casi completa hasta la altura del primer piso de los edificios. Otra gran ciudad de la Comunidad Valenciana, Alicante, sufrió lluvias de 217 mm en pocas horas, entre otras muchas. Hubo pueblos que se consideraron arrasados, donde el agua llegó a una altura de ocho metros y algunos se decidió trasladarlos hacia una nueva ubicación, una vez pasado el desastre y aún quedan los restos de los antiguos asentamientos como recuerdo de aquella amarga experiencia, que dejó un triste saldo de más de 30 muertes. Posteriormente, se construyó una nueva represa, con más de 4 veces la capacidad de la anterior y que se terminó en 1996.
  • País Vasco, Cantabria, Navarra y Burgos. El 26 de agosto de 1983, las lluvias intensas produjeron el desbordamiento del río Nervión y otros de la Región Cantábrica, en la costa norte de España. Más de 100 municipios se declararon como zona catastrófica; 39 personas perdieron la vida y cinco personas se reportaron desaparecidas. De las pérdidas humanas, 34 correspondieron al País Vasco. Y en el caso de Bilbao, capital y mayor ciudad de dicha comunidad autónoma, que es atravesada por el Río Nervión, el agua alcanzó 5 metros de altura y reportó el tercio del total de pérdidas materiales contabilizadas en todo el evento.
    Oliva 1987 - Récord de lluvia en España
  • Safor, comarca de la Comunidad Valenciana. El 3 de noviembre de 1987, ocurrieron fuertes lluvias en toda la comarca. En el caso del municipio de Oliva, se alcanzó el récord de España de cantidad de agua llovida en 24 horas: 817 mm.
  • Murcia y Alicante En 1989. Varias víctimas en Bolnuevo, Mazarrón. Lluvias intensas en la cuenca del Segura que provocan el desbordamiento en varios puntos, entre ellos en Orihuela.
  • Castellón y Norte de Valencia, en 2000. Los últimos días del mes de octubre un largo periodo de gota fría provocó precipitaciones acumuladas de más de 600 mm en tres días, que desbordaron ríos como el Palancia, Veo, Mijares y provocaron serias inundaciones en Onda, Nules, Castellón y Vall de Uxó y a punto estuvieron de asolar el embalse de María Cristina y el de Benitandús.
  • Tenerife en 2002. Una DANA ocasionó lluvias torrenciales en el área metropolitana de Santa Cruz de Tenerife, dejando un balance de 8 muertos, 12 desaparecidos y cuantiosas pérdidas materiales, así como más de 70 mil personas sin electricidad. Tuvo la característica de que las precipitaciones torrenciales afectaron a un área muy reducida del entorno de la ciudad. Llovió 232,6 mm en 24 horas, el récord de esta ciudad para ese tiempo y también significativo fue el dato de 129,9 mm en solo una hora. La lluvia comenzó a caer con intensidad en la capital y alrededores entre las 15.00 y las 16.00 horas, mientras que un poco más al norte y al sur apenas caían algunas gotas. Escampó una media hora y a continuación arrancó de nuevo a llover con gran intensidad hasta las 20.00 horas. Las publicaciones de la prensa señalan que el Instituto Nacional de Meteorología no avisó de la catástrofe y el día previo advirtió sólo de "chubascos moderados".
    Beniarbeig - caída del puente (2007)
  • Beniarbeig, es una pequeña población y un municipio de la Comunidad Valenciana. El 12 y 13 de octubre de 2007, hubo inundaciones causadas por precipitaciones que superaron los 400 mm en algunos puntos y que provocaron la mayor crecida documentada del río Girona. Contradictoriamente, este es un pequeño río de 38 km de longitud y que, debido a su escaso caudal, hay tramos que desaparecen en determinados momentos del año. Sin embargo, ha sido notorio por provocar inundaciones fuertes, entre ellas en 1919, 1941, 1985 y la señalada de 2007, que afectó varias poblaciones en su cauce y en el caso de Beniarbeig, inundó parte del pueblo, con el trágico desenlace de la muerte de una anciana que no pudo escapar de la inundación de su vivienda. Además, tuvo repercusión en los medios españoles, porque una periodista del canal local estaba reportando las inundaciones y de pronto, parte del puente que tenía enfrente se derrumbó, lo cual se trasmitió en vivo por la televisión. En total, las intensas lluvias y la consecuente crecida del río destrozaron 1.200 casas, 1.500 autos y varios kilómetros de viales; 32 inmuebles quedaron precintados y muchos acabaron demolidos; las furiosas aguas del río Girona volvieron irreconocibles las calles de varios municipios.
  • Murcia. El 28 de septiembre de 2012, una DANA descargó gran cantidad de agua en toda la cuenca del Valle del Guadalentín, que debe su nombre al río de igual nombre (y señalado en el presente artículo por la catástrofe provocada en la misma región en 1973). En esta ocasión, tuvo como consecuencias siete víctimas mortales e innumerables daños materiales, entre ellos el derrumbe del puente de la autovía en Puerto Lumbreras, miles de animales enterrados con riesgo de producir serios problemas sanitarios, carreteras rotas y cientos de viviendas afectadas.
  • Comunidad Valenciana El 29 de octubre de 2024. Un fenómeno meteorológico de DANA afectó a una amplia zona del sur y el este del territorio español. En unas pocas horas cayó en algunas zonas el equivalente a un año de lluvia, lo que provocó grandes crecidas de ríos que arrasaron localidades enteras, dejando atrapadas a miles de personas. En algunos lugares se registraron hasta 445,4 litros por metro cuadrado. Las precipitaciones llegaron acompañadas de fuertes vientos y tornados. Las graves inundaciones afectaron principalmente la región de Valencia, donde se reportaron 215 fallecidos, aunque también hubo afectaciones en Castilla-La Mancha, incluyendo 7 fallecidos y en Andalucía (1), para un total de 223 fallecidos y otras cuatro personas más desaparecidas (datos del 12 de diciembre de 2024).[4][5][6][7][8][9][10][11]

Ver artículo DANA en Valencia (2024)

En América del Sur:

  • Chile. En el período comprendido entre el 26 de marzo y el 2 de abril de 2007, un evento meteorológico de características similares a la llamada “gota fría” o DANA, se desarrolló frente a las costas del centro de Chile, produciendo importantes cambios en la circulación atmosférica sobre el Cono Sur. Durante ese período se favoreció el avance de aire tropical, húmedo e inestable hacia el centro-este de Argentina, produciendo intensas precipitaciones durante varios días consecutivos sobre esa región, las cuales provocaron inundaciones sobre el sur de Santa Fe y el sur de Entre Ríos.
  • Argentina. El 8 de julio de 2007, tras una importante irrupción de aire polar antártico hacia el centro y norte de Argentina, una baja segregada comenzó a organizarse sobre el centro de Chile. Al avanzar al continente durante el día siguiente (9 de julio), produjo nevadas atípicas en varias localidades del centro de Argentina, incluida la ciudad de Buenos Aires, donde no nevaba desde 1918. Y durante aquel 9 de julio y la madrugada del 10, la nieve no solo cayó en la capital argentina, también hubo registros de nevadas en varias localidades del norte de la provincia de Buenos Aires, en el sur de Santa Fe, Córdoba, San Luis, norte de Mendoza, San Juan, La Rioja y hasta en Catamarca.
  • A fines de febrero y comienzos de marzo de 2008 se desarrolló otra baja segregada, esta vez sobre el Río de La Plata y Uruguay, que produjo un extenso período de mal tiempo de aproximadamente 10 días sobre Buenos Aires, con precipitaciones persistentes. En medio de ese período, el 2 de marzo se registraron 2 trombas marinas sobre el Río de La Plata, frente a las costas de Olivos.
    Inundaciones en Neuquén - Argentina
  • A comienzos de abril de 2013, una importante baja segregada se formó sobre el centro de Argentina, y fue la causante de las intensas precipitaciones registradas el día 2 sobre Buenos Aires y La Plata, produciendo importantes inundaciones sobre ambas ciudades.
  • Un año después, principios de abril de 2014, otro evento de similares características se desarrolló sobre el Océano Pacífico, frente a las costas del centro-sur de Chile, manteniendo el ambiente húmedo e inestable sobre el centro de Argentina por una semana. En su avance hacia el este el día 7 de abril, produjo intensas precipitaciones sobre el norte de la Patagonia, provocando inundaciones sobre la Provincia de Neuquén, las peores en 40 años. Y estas inundaciones han continuado en los años sucesivos, como las ocurridas el 7 de abril de 2017.[12][13][14]

Referencias