Gonzalo Sánchez de Lozada

Gonzalo Sánchez de Lozada
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Gonzalo Sánchez, responsable de crímenes durante su presidencia.
Presidente de Bolivia
6 de agosto de 2002 - 17 de octubre de 2003
PredecesorJorge Quiroga Ramírez
SucesorCarlos Mesa Gisbert
Datos Personales
NombreGonzalo Sánchez de Lozada y Sánchez Bustamante
Nacimiento1 de julio de 1930
distrito Murillo,
La Paz,
Bolivia Bandera de Bolivia
EducaciónFilosofía y Literatura Inglesa
Alma materUniversidad de Chicago
Partido políticoMovimiento Nacionalista Revolucionario (MNR)
TítulosPremio Musa de Oro 1995, Premio Latinoamericano al Liderazgo 1996, Doctor Honoris Causa por diversas universidades de Estados Unidos y Japón
CónyugeXimena Iturralde
HijosAlejandra Sánchez Iturralde
PadreEnrique Sánchez Irigoyen
MadreCarmen Sánchez Bustamante

Gonzalo Sánchez de Lozada (La Paz, 1 de julio de 1930) es un empresario boliviano, presidente de su país (1993-1997 y 2002-2003), responsable de crímenes durante su presidencia. Tuvo que abandonar el cargo en octubre de 2003 tras varias semanas de revueltas populares.

Síntesis biográfica

Familia

Nació el 1 de julio de 1930, en el céntrico Murillo, La Paz, Bolivia. Perteneciente a una de las familias más sobresalientes de Bolivia, hijo de Enrique Sánchez de Lozada Irigoyen y Carmen Sánchez Bustamante. Vinculados al partido Movimiento Nacionalista Revolucionario (MNR), su padre ejerció durante muchos años en Estados Unidos, asumiendo la embajada diplomática en Washington, entre 1930 y 1936, y como catedrático de Ciencia Política en la Universidad de Harvard.

Primeros años

El exilio del padre en los Estados Unidos, hizo que desde el primer año de edad viviera allí, conviviendo en varias ciudades Washington, Boston y Williamstown, en Massachussets. Toda su educación escolar la realizó aquí. Luego matriculó en la Universidad de Chicago en Illinois, obteniendo el título de licenciado en Filosofía y Literatura Inglesa. Dominando con perfecta habilidad el inglés hablado y escrito, no distinguiéndose en este aspecto de un nativo culto.

Fue su idioma diario, al punto de descuidar el español y hablarlo con bastante imperfección, sin embargo, su madre se propuso que fuera, al menos, su segunda lengua. Siempre tuvo la nacionalidad boliviana a pesar de haber transcurrido su infancia y parte de su juventud allí.

Regreso al país

Gonzalo regresó a su país en 1951, dispuesto a permanecer y con variados proyectos empresariales su traslado se produjo en vísperas del levantamiento revolucionario de abril de 1952. Tras los sucesos donde el MNR tomó el poder y llevó al Gobierno a sus dos máximos líderes, Víctor Paz Estenssoro y Hernán Siles Zuazo, y a raíz del cual don Enrique (el padre) puso término a su exilio en Estados Unidos.

Negocios e inicios en la política

Dedicaría su tiempo a la creación de variadas empresas que fundó y dirigió en los siguientes 25 años, entre ellas destacaron la productora cinematográfica Telecine 1953, la Andean Geo-Services, dedicada a las prospecciones petroleras y los trabajos de geodesia 1957, la más importante de ellas la Compañía Minera del Sur (Comsur), creada en 1962 a partir de la productiva explotación de la mina Porco, en el departamento de Potosí.

Para finales de los años sesenta era ya uno de los más poderosos industriales de las minerías del estaño y el zinc. Comsur, a través de una red de empresas filiales y multinacionales del ramo, fue inaugurando nuevos yacimientos o comprando otros ya en servicio, de metales no ferrosos, auríferos y argentíferos.

En 1979, mientras el país pretendía, dejar atrás años de dictaduras militares y gobiernos de facto, y recuperar la civilidad democrática, Gonzalo abandonó temporalmente la presidencia de Comsur para debutar en la política profesional en las filas de su partido de toda la vida, el MNR.

Fue nombrado presidente de la Cámara Alta y fue el encargado de tomar juramento al nuevo presidente de la República, Víctor Paz Estenssoro. Un año después, fue nombrado ministro de Planificación y Coordinación, cargo desde el que impulsó un plan de liberalización económica recogido en el decreto de Nueva Política Económica. A los dos años de poner en marcha su plan, el país registró el primer índice de crecimiento de la economía y una lenta recuperación del sistema. En diciembre de 1990 planteó la convocatoria de una Asamblea Constituyente para cambiar el sistema político del país, con el objetivo de abandonar el presidencialismo en favor de un nuevo sistema parlamentario. Ese mismo mes acordó, junto con los líderes de los demás partidos de oposición, establecer las pautas para la reforma electoral, agilizar la descentralización administrativa y continuar el juicio abierto contra ocho magistrados de la Corte Suprema, acusados de daños económicos al Estado por invalidar una ley de impuestos.

Primer mandato

El 6 de agosto de 1993 Gonzalo tomó posesión de la Presidencia con un mandato cuatrienal, en un acto al que asistieron los presidentes Carlos Menem de Argentina, César Gaviria de Colombia, Alberto Fujimori de Perú y Juan Carlos Wasmosy de Paraguay (éste último en calidad de presidente electo), así como, realizando una visita histórica, el presidente cubano Fidel Castro Ruz. La primera gestión presidencial estuvo caracterizada por un amplio compendio de reformas en la educación, los órganos de justicia, los servicios sociales y, sobre todo, en la economía, cuyo enfoque muy liberal apuntó al deseo del mandatario, por largo tiempo acariciado, de meter al país de manera total y definitiva en las corrientes de integración regional y de mundialización de los intercambios.

Dispuso la descentralización administrativa, introdujo el sistema de fondos de pensiones gestionados por empresas privadas y emprendió una privatización consistente en la apertura de las empresas de propiedad estatal al capital foráneo -europeo, estadounidense y sudamericano, que podía adquirir la mitad de sus acciones y hacerse cargo de su administración. La Ley de Capitalización, de marzo de 1994, autorizaba al Ejecutivo a vender hasta el 50% de los activos empresariales a compradores privados y a transferir gratuitamente el otro 50%, de titularidad estatal, a todos los ciudadanos mayores de edad mediante las llamadas "acciones populares", las cuales servirían para financiar las pensiones de jubilación contratadas con sociedades privadas.

Los campesinos cocaleros, sobre todo los de la región selvática de Chapare, en Cochabamba, liderados por el indígena aymara Evo Morales Ayma, jefe sindical de la Coordinadora de Federaciones del Trópico de Cochabamba, y alentados por el también aymara Felipe Quispe Huanca, dirigente de la Confederación Sindical Única de Trabajadores Campesinos de Bolivia (CSUTCB), no dejaron de quejarse de lo magro de las indemnizaciones que recibían por la venta de sus fincas al Gobierno, cuando no se oponían resueltamente, a veces recurriendo a la violencia, al conjunto del plan gubernamental, que no desdeñaba las expropiaciones forzosas y que apostaba por las siembras de banano, piña, palmito y flores tropicales.

Fuera de esta controversia, el Plan de Capitalización aportó al Estado ingresos por valor de 1.700 millones de dólares a la vez que tuvo un efecto catalizador de un proceso ya en curso, el de la progresiva dolarización de la economía boliviana. Tal como había anunciado, en noviembre de 1996, el Gobierno se apoyó en ese 50% de acciones reservado al Estado de los seis monopolios intervenidos para lanzar un bono anual de solidaridad (bonosol) de 240 dólares dirigido a todos los bolivianos mayores de 21 años y cubrir así una deuda social perentoria. Los bonos sociales y los fondos de pensiones mantenidos en parte con las aportaciones en cuenta individual de los afiliados a la seguridad social pretendían hacer llegar a los ciudadanos los beneficios de las privatizaciones parciales.

El 6 de agosto de 1997 Sánchez hizo entrega de la Presidencia a Hugo Banzer, quien formó la llamada megacoalición de Gobierno con todos los partidos parlamentarios, más unos cuantos extraparlamentarios, a excepción del MBL y la Izquierda Unida.

Segundo mandato

Gonzalo asume la Presidencia de la República de Bolivia al ganar por quinta ocasión una elección nacional. Es favorecido por una asociación de su partido el MNR, con el MIR (Movimiento de Izquierda Revolucionaria), al que luego se sumaría NFR (Nueva Fuerza Republicana) dividiendo los cargos políticos entre los 3 partidos.

Ocupa la presidencia para enfrentar una crisis social y económica hereda del anterior gobierno. El crecimiento económico del país bajó de un 4,8% al final de la primera presidencia de Sánchez de Lozada a 2% en 2002. El déficit fiscal al 2002 era del 8%. El 6 de diciembre Gonzalo participó en Brasilia en la XXIII Cumbre de Presidentes del MERCOSUR, que entrañó la adopción del Acuerdo de Complementación Económica entre el MERCOSUR y la CAN, con vistas a articular un Área de Libre Comercio entre los dos bloques a corto plazo, así como los Acuerdos sobre Regularización Migratoria Interna de los Ciudadanos y Residencia para Nacionales del MERCOSUR, Bolivia y Chile, que allanaban el camino para la libre circulación de personas entre los países signatarios, un avance fundamental hacia la construcción de un mercado común.

El 10 de febrero el gobierno presentó el nuevo impuesto directo, progresivo y no deducible, de hasta el 12,5%, con el que esperaba obtener los ingresos fiscales que no generaba el impuesto sobre el valor añadido (IVA), el cual permitía hasta ahora a los bolivianos deducir con facturas de consumo incluso la totalidad del gravamen del 13% sobre la renta personal. El país se sumergió en un gigantesco caos a raíz de los choques entre unos cuantos millares de manifestantes y efectivos del Ejército. El 13 de octubre, con La Paz a punto de sumergirse en la insurrección popular y 20.000 personas manifestándose en las calles, y las protestas extendiéndose a los demás departamentos del país a excepción de los habitualmente pacíficos Beni y Pando. Gonzalo efectuó un anuncio de trascendencia: dejaba en suspenso los planes sobre el gas y convocaba a un diálogo nacional que se desarrollaría hasta el 31 de diciembre, en el curso del cual el Gobierno recogería las opiniones de todos los sectores sociales.

El presidente empezó a sufrir desplantes políticos en su propio campo. El mismo día 13, el vicepresidente Carlos Mesa Gisbert, retiró su apoyo a Gonzalo alegando razones de conciencia, mientras que el ministro de Desarrollo Económico, el mirista Jorge Torres Obleas, presentaba la dimisión también en desacuerdo con el recurso al Ejército para frenar las protestas. Acosado por estos sectores y ante la pérdida de apoyo de los partidos que formaban la coalición de gobierno (MIR y NFR), el 17 de octubre Gonzalo Sánchez de Lozada renuncia a la Presidencia de la República mediante carta al Congreso Nacional y deja el país.

Búsqueda y enjuiciamiento

Después de la renuncia y partida del país junto a miembros de su gabinete y familia, con destino a Washington; la Fiscalía General de Bolivia anunció una resolución para iniciar el enjuiciamiento político y penal del ex presidente con el objetivo de depurar su responsabilidad en la revuelta social que se saldó con setenta muertos. En 2007, la Corte Suprema ordenó su búsqueda y captura e inició los trámites para la solicitud de extradición del ex mandatario desde Estados Unidos, país en el que reside. Tras varios intentos por encarcelarlo y asumir la culpabilidad no pudo llevarse a cabo los planes trazados por que según el embajador de Estados Unidos en La Paz gozaba de estancia legal en su país.

El 4 de abril de 2018, el jurado de la Corte de Fort Lauderdale del estado de Florida, Estados Unidos (EE.UU.), lo declaró culpable a el y su exministro de Defensa Carlos Sánchez Berzaín, por la masacre de octubre de 2003.[1].

Premios

Posee el premio Musa de Oro, otorgado en 1995 por la Organización homónima basada en Caracas, y el Premio Latinoamericano al Liderazgo, concedido en 1996 por la Fundación Panamericana para el Desarrollo (FUPAD). Igualmente Doctor Honoris Causa por diversas universidades de Estados Unidos y Japón, y miembro del Club de Madrid así como del Consejo de Presidentes y Primeros Ministros del Programa de las Américas del Centro Carter de Atlanta, Estados Unidos.

Referencias

Fuentes

  • Arguedas, Alcides. Historia General de Bolivia.1992.
  • Klein, Herbert S. (2002). Historia de Bolivia. 3. ed. aum. y correg. La Paz: Juventud.